Anuncio Trofeo Carranza 1964
En 1964 el Betis participa por primera vez en el Trofeo Carranza en Cádiz. Varias son las circunstancias que hicieron que hasta la décima edición no participara el club verdiblanco en el trofeo gaditano: hay que tener en cuenta que en las tres primeras ediciones el Betis estaba en Segunda División, pero desde 1958 militó en Primera División y generalmente con clasificaciones brillantes. Pero es, sobre todo, la mala relación existente entre el club y el ayuntamiento gaditano precisamente desde 1958, cuando, a raíz de una serie de incidentes en un partido de Liga, el alcalde de Cádiz, José León Carranza, declara oficialmente la prohibición de que el Betis dispute partido alguno en el estadio Carranza, a no ser que sea de competición oficial. Y no olvidemos que el trofeo era organizado por el Ayuntamiento.
Hay que señalar que esta actitud corresponde única y exclusivamente al alcalde de Cádiz, y que para nada es compartida por el club cadista. Es más, en la propia prensa gaditana el alcalde de la ciudad se enfrenta públicamente al Cádiz CF prohibiéndole de forma expresa invitar al Betis a jugar en el estadio municipal.
Es por esa razón por la que el Betis estará ausente del Trofeo Carranza hasta que la tensión con el Ayuntamiento gaditano se olvide con el paso del tiempo. Ya en 1963 hubo un intento de aproximación para que el Betis disputase el trofeo, pero no se concretó hasta 1964, en un excelente cartel que reunía al Benfica, que era el campeón en vigor del trofeo, al Real Madrid, Boca Juniors y al Betis.
El equipo bético, a quien entrenaba el francés Luis Hon, se había clasificado en tercera posición en la Liga anterior, por lo que por primera vez iba a participar en competición europea. Como preparación de la temporada se organizó una gira por Europa (Alemania, Holanda y Bélgica) y esta incursión por primera vez en el Trofeo gaditano, trofeo para el que no partía entre los favoritos. De hecho, en cada trofeo se entregaban 3 copas y una bandeja, motivo por el que al Betis se le había asignado el papel de «camarero», aunque al final diera la gran sorpresa y se llevara el máximo galardón.
El trofeo aún se jugaba en el formato inicial: en sabado las dos semifinales y en domingo la consolacion y la gran final, con horario a las seis y media de la tarde y a las once de la noche.