Postpartido: Jugó, ganó y, de paso, recuperó la sonrisa
Fueron necesarios cuatro meses para que el Benito Villamarín recuperase la sonrisa. El Real Betis Balompié se impuso al Valencia C.F. gracias a un solitario gol de Rubén Castro que supo a gloria y que sirvió para calmar los ánimos en la Avenida de la Palmera tras semanas de incertidumbre. Tres puntos de oro para dejar la zona de peligro a cuatro puntos y para confirmar que hay mimbres suficientes para olvidar la racha de las últimas semanas.
El cuadro de Juan Merino no comenzó con buen pie el encuentro. Pese a que el técnico linense puso sobre el tapete verdiblanco su once de gala, los heliopolitanos se toparon con un Valencia bien plantado y bastante ordenado en la presión, lo que acabaría por dificultar la ya complicada salida del balón del conjunto bético. Los primeros 45 minutos del encuentro estuvieron dominados por el miedo. Ambos conjuntos se jugaban hoy la vida en el Villamarín y las ocasiones brillaron por su ausencia, más allá de una clara de Van Wolsfwinkel al filo del descanso.
Ya en la segunda mitad, ambos conjuntos comenzaron a entonarse y la balanza pudo decantarse a favor de cualquiera de los dos. Juan Merino sacó su artillería frente al cuadro ché. Con N´Diaye y Petros de nuevo en el doble pivote, las novedades estuvieron en las bandas. Dani Ceballos y Charly Musonsa fueron los protagonistas. El joven belga, de estreno estelar, acompañaba al canterano, mientras que en punta Ricky era el encargado de acompañar en la tarde de hoy a un Rubén Castro que volvió a “mojar”.
A priori, los verdiblancos contaban con todo lo que tenían para poner en apuros a un Valencia que sigue deambulando esta temporada pero, pese a ello, la presión del conjunto de Gary Neville y las dificultades de los verdiblancos en la creación hicieron que la tarea de desatascar el encuentro fuera un quebradero de cabezas para los de Merino aunque, fruto de la insistencia y la buena actitud en el día de hoy, además de la aportación de Montoya y Musonda, se hizo realidad con el tanto del canario.
Comenzamos hablando de la portería. Pese a que Antonio Adán no tuvo hoy un día especialmente difícil, el guardameta madrileño se mostró concentrado y siempre atento a los escasos acercamientos del conjunto ché. Los de Neville, que sondearon la zona de tres cuartos con asiduidad, no lanzaron entre los tres palos con peligro, aunque Adán estuvo rápido para atajar los balones por alto y para solventar un mano a mano con Rodrigo en los instantes finales del encuentro, casi sin tiempo para la reacción. De nuevo, uno de los hombres destacados.
Antonio Adán – 9
La línea defensiva cuajó un encuentro notable. La pareja Pezzella – Bruno funciona mejor con el paso de las jornadas gracias a que el argentino, poco a poco, hace bueno el desembolso que este verano hizo el Betis en su figura. El ex de River Plate fue el mejor de la zaga. Estuvo siempre atento y secó a Álvaro Negredo. La continuidad del central argentino ha sido el antídoto perfecto para que, finalmente, se adapte a la liga española y ponga las cosas muy difíciles a Heiko Westermann. Junto a él, Bruno cuajó otro encuentro bastante completo, siempre atento en las ayudas, aunque ambos sufrieron algo más con la entrada de Rodrigo y Santi Mina, mucho más veloces en las contras.
Por otro lado, los laterales tuvieron un nuevo protagonista. Martín Montoya se presentaba en el Benito Villamarín con una actuación que rozó la perfección. El ex del Inter de Milán no acusó la falta de rodaje y tanto en defensa como en ataque mostró credenciales para hacerse dueño del lateral derecho desde ya. Sin duda, Cheryshev no guardará un buen recuerdo del catalán. Además, Juan Vargas volvió a mostrar su mejor versión en el lateral izquierdo. El peruano sigue dando síntomas de seguridad en su puesto, algo que se ha visto aumentado gracias a su buena forma física, mejorada en las últimas semanas. Esfuerzo, intensidad y liderazgo en su puesto. Tanto su nivel como el de Montoya dan tranquilidad a la parroquia verdiblanca para afrontar un tramo decisivo de la competición.
Germán Pezzela – 9 JuanVargas – 9
Bruno – 8 Martín Montoya – 9
La pareja Petros – N´Diaye en el doble pivote defensivo es sinónimo de buenos resultados. Tanto el senegalés como el brasileño se han ganado a pulso el respeto de toda la entidad verdiblanca. Ambos se han convertido en los líderes de un equipo que, con ellos, funciona mejor. Incansables en la contención, son un incordio para sus rivales y los de Gary Nevilles sufrieron y no fueron capaces de ganar la batalla n el centro del campo, saldada con la actuación estelar de ambos tanto con balón, como sin balón a la hora de presionar.
Petros Matheus – 8
Alfred N´Diaye – 8
La línea ofensiva tuvo nombre y apellido: Charly Musonda. El joven belga no tuvo piedad de sus rivales y sus 19 años no fueron un impedimento para echarse el equipo a la espalda y liderar todo el peligro del cuadro de Juan Merino. Desequilibró a la defensa ché hasta el punto de desquiciarla y provocar la expulsión de uno de sus componentes, Gayá. El ex del Chelsea ya ha mostrado su carta de presentación y, pese a su inexperiencia en la élite, su calidad y descaro sirven para que pase a ser uno de los hombres fuertes de los onces de Juan Merino.
Junto al belga, Dani Ceballos recuperó la titularidad desde el extremo y el utrerano mostró una buena versión. Trabajó sobre el césped y aportó juego, principalmente en la segunda mitad. La del Valencia era una prueba de fuego, puesto que la llegada de Fabián Ruiz aumenta la competencia entre ambos canteranos.
Además, por fin Juan Merino fue consciente de que la aportación de Rubén Castro aumenta junto a un compañero. El técnico verdiblanco premió la buena actuación de Ricky Van Wolfswinkel en el segundo tiempo frente a la Real Sociedad. El holandés acompañó al canario en punta de ataque y, pese a que sus primeros 45 minutos no fueron buenos, mejoró en el segundo tramo del encuentro. Oxigenó el ataque e hizo funcionar la sociedad con Rubén Castro. Fruto de ambos llegaría el único tanto del encuentro tras una acción involuntaria del holandés que acabaría en una asistencia para que el de siempre, Rubén Castro, sumara su segunda jornada consecutiva como goleador.
Charly Musonda – 9 Ricky Van Wolfswinkel – 6
Dani Ceballos – 7 Rubén Castro – 7
Por fin, el Benito Villamarín vio ganar a su equipo. Tras meses de derrotas y empates, el feudo verdiblanco fue una fiesta para olvidar ya semanas de incertidumbre y para recuperar las buenas sensaciones que ya se venían mostrado jornadas atrás ante Villarreal, Madrid o Real Sociedad. El Betis ha vuelto y muestra actitud, intensidad y credenciales suficientes para afrontar un tramo decisivo de la temporada. 25 puntos y racha de partidos sin ganar olvidada. Las buenas sensaciones deben continuar.