Al heredero de manos mágicas
Hoy va mi contracrónica dedicada a una persona que lleva desde que yo tengo uso de razón en el Real Betis Balompié. Va para José María Montiel, masajista del primer equipo y que horas antes del partido frente al Olympique, perdió a su madre para siempre.
José María es hijo de otro histórico del club verdiblanco. Su padre Vicente fue también masajista del Betis y de la selección española. Era conocido por “manos mágicas” y estuvo ligado al club de sus amores durante varias décadas. Su hijo siguió sus pasos y desde el año 1993 presta sus servicios en el Real Betis. Sus carreras veloces son famosas en el Villamarín, ya sean para atender a un jugador lesionado o para llamar a un futbolista que calienta esperando su visita para entrar a jugar. Por sus manos han pasado jugadores de la talla de Alfonso, Finidi, Jarni, Joaquín, Oliveira o Gordillo, por citar a algunos. Se ve que Jonathan Pereira era más importante que los anteriormente citados porque se negaba a que José María le tocase, al no ser fisioterapeuta titulado. A cretino no le gana nadie al gallego del Villarreal. Estando en Lyon a la espera de que su equipo jugara el penúltimo partido de la fase de grupos de la Europa League, recibió la noticia del fallecimiento de su madre. Mi sorpresa fue mayúscula cuando lo vi en la tele corriendo para atender a Verdú. Solo un profesional enorme es capaz de permanecer ahí, al pie del cañón, en un momento tan doloroso.
Que sirvan estas palabras para reconocer tantísimos años de servicio al Betis y para transmitirle mis condolencias y, me lo permito, la de todos los que lean esta contracrónica. Un abrazo enorme José María.
Noticia por Selu Vega
Bético de nacimiento, vocación y pasión. Desde Manquepierda intento acercarme a cada bético que puebla el mundo. Director del grupo Manquepierda.com. Si tienes alguna sugerencia o queja, conmigo puedes hablar. Vivo en Canarias pero tengo el corazón instalado en Heliópolis.
