Betis – Leganés: Ridículo en Villamarín (1-3)
Leganés, y solo Leganés es el equipo que ha aparecido en el feudo hispalense en el que el Betis ha sido vapuleado, y ha recibido un baño de juego, de goles, de táctica, posesión, intensidad y ganas de ganar. Con un futbolista menos, el Leganés ha sido muy superior al Betis, de esperpento y de auténtico ridículo lo vivido en el Villamarín.
Inicio gris, flojo y apagado, como el día en la capital hispalense, el que tuvo el Real Betis en el Benito Villamarín. La lluvia caída en los últimos días hacía que el césped estuviera en óptimas condiciones para el desarrollo del juego verdiblanco que tanto le gustaría realizar Pepe Mel. Sin embargo para conseguir ese juego es indispensable ponerle más intensidad en la presión y que el rival no se plante con tanta facilidad en la portería de Adán.
El gol visitante se olía a leguas, a kilómetros. El Leganés estaba siendo muy superior en el partido, dominando la posesión, las llegadas, las ocasiones, y el marcador. Poco después de los veinte minutos, el Lega se adelantaba en el marcador con el gol de Eraso, después de que Figueras abandonara su posición a cerrar un pase interior y dejando el hueco a su espalda. El problema no era el gol en sí de los hombres de negro, era más la sensación que estaban dando los verdiblancos que se veían desbordados minuto a minuto.
El baño del Leganés en la primera parte era increíble. Eran llegadas constantes sobre Adán que se empleaba a fondo una y otra vez para que no se ampliara. La superioridad numérica del Betis tras la expulsión era solo eso, superioridad numérica, porque en el juego seguía el partido casi por los mismos derroteros. En un córner, otro error defensivo, Figueras no la huele, suponía el segundo gol del Leganés.
Una primera mitad de ridículo del Betis en la que el marcador no reflejaba lo que había ocurrido sobre el césped. El 0-2 con el que se fue el partido al descanso era corto, ya que el conjunto visitante se podía haber marchado al vestuario con una renta altamente superior.
El cambio de Portillo, quitándolo del tapete para dar entrada a Ceballos y dejando sobre el mismo a Pacheco, que no aportaba mucho o nada, fue algo inexplicable para la parroquia hispalense. Si tienes que remontar, los “buenos” deben estar dentro del campo, y Portillo ha dado ese último pase en los últimos partidos en varias ocasiones, no era momento de quitarlo.
Honestamente, el marcador debía ser más abultado y al poco de empezar la segunda mitad, el Lega conseguía el tercero en un córner al quedar el balón suelto dentro del área y donde la defensa se mostró nuevamente muy pasiva. Y es que las llegadas, y muy claras, seguían siendo para el Lega. Los pupilos de Garitano se paseaban como Pedro por su casa pese a jugar con un hombre menos.
Vadillo, que entró con ganas y encarando varias veces, realizó una buena jugada que cedió a Molina para que recortara distancias en el marcador. Quizás de lo único positivo, o menos malo del encuentro, fue eso, la entrada de Vadillo que se le veía con ganas.
Poco más. El Betis con el gol se aproximó más a la portería rival pero no sirvió para nada y en el Villamarín se vivió uno de los peores partidos que los béticos han podido ver. Baño de juego y goles del Leganés al Betis en casa hispalense.
Ficha del partido
Real Betis Balompié: Adán, Molinero, Bruno, Figueras, Casado, Lolo Reyes – Vadillo (50’), Pacheco – Rennella (50’), N´Diaye, Portillo – Ceballos (35’), Molina y Rubén Castro.
CD Leganés: Serantes, Soriano, Mantovani, Marc Betrán, Postigo, Aguirre – Eizmendi (78’), Diamanka, Álvaro – Delgado (88’), Erik Morán, Eraso, Sergio Prendes – Peña (64’)
Goles: 0-1 Eraso (22’), 0-2 Marc Betrán , 0-3 Pulido (48’), 1-3 Molina (72’)
Árbitro: González Fuertes, amonestó a los locales: Figueras, Ceballos y Vadillo; y a los visitantes: Marc Bertrán, César Soriano. Expulsó a Diamanka por doble amarilla.

Noticia por Luis J. Torres
Periodista sevillano y bético, dedicado a la información deportiva del Real Betis Balompié.