El año en que marcar en El Arcángel era misión imposible, por José Miguel Navarro

Córdoba CF, 1964. Foto: soydelcordoba.com
El Córdoba Club de Fútbol nació en la década de los cincuenta, como continuador de una prolífica saga de escuadras que, una tras otra, fueron fusionándose hasta configurar la versión definitiva que ha llegado a la actualidad.
Tan solo ha militado ocho temporadas en Primera división, escenario que no pisa desde la lejana 71-72. Cuatro décadas hace, como quien no quiere la cosa, que los verdiblancos no se enfrentan en partido de la máxima entre sí. En la Liga Adelante, lugar natural de los califales pues, ha sido precisamente ahí, donde han consumido la mayoría de su Historia, no hace tanto del último derby regional, concluido con empate a uno. Fue en el pasado ejercicio.
El Córdoba, como el Betis y el Málaga, tiene tres títulos de Campeón en diferentes categorías. Ha sido una vez de Campeón de Tercera, dos de Segunda B y una más, de Segunda A.
Debutó en la élite en el curso 62-63, con un honroso duodécimo puesto y cayendo, únicamente, en cinco choques. Hacía escasamente ocho años que había sido fundado. A partir de ese hito, empalmó siete calendarios consecutivos para despeñarse en 1969, como último clasificado, volviendo efímeramente al principio de los setenta, en un bello canto del cisne que solo duró una Liga. Su mejor clasificación fue un quinto puesto, el de la 64-65, con dieciséis victorias, once derrotas y tres empates, para totalizar treinta y cinco puntos y cinco positivos. Ese año nos legó, este mítico equipo hermano, un récord difícil de batir: el de encajar solo dos tantos como local en un campeonato tan exigente como el hispano, recientemente designado como el mejor del planeta.
Los afortunados que lograron anotar en El Arcángel fueron el Real Club Deportivo Español de Barcelona y el Real Zaragoza. El único que cantó diana con otra camiseta que no fuese la de los colores de Andalucía, fue el legendario Alfredo Di Stéfano, que lo hizo vestido de periquito porque, el gol de los maños, se lo hizo en propia puerta Ricardo Costa. Con tan espectacular marca, el viejo feudo cordobesista no vio a los suyos perder en toda la competición. Lástima que, en aquellos años, con esa posición final no se viajase a Europa.
Al término de las treinta fechas disputadas, al Córdoba solo lo precedieron el Real Madrid, vencedor, Atlético de Madrid, Zaragoza y Valencia, superando en la tabla a grandes como el Fútbol Club Barcelona, Athletic de Bilbao o a los dos clubes sevillanos, que firmaron unos números mediocres. El Pichichi fue el barcelonista Cayetano Re y el Zamora el madridista Betancort. Como curiosidad final señalar que, los Pirri, Grosso y Sanchís, dieron a los de Concha Espina su quinto torneo doméstico consecutivo, tras levantar una situación que parecía imposible en la jornada veinticinco, cuando los colchoneros del Calderón vencieron en el Bernabéu. Lo hicieron ganando los ocho últimos puntos en disputa.
José Miguel Navarro Barrera