El Betis paga el peaje de la Copa (1-1)
Llegaba con lo justo a El Alcoraz y sacó un merecidísimo empate. El Betis encontró un hueso duro de roer en su visita a Huesca, donde los pupilos de Onésimo, tantearon al principio y se revolucionaron con el paso de los minutos. Un error de Arzu permitió a los de casa ponerse por delante, pero en tres minutos se redimió de su castigo. Buen botín en un campo, a sabiendas, muy complicado.
Sorprendió Mel con un esquema donde Iriney aparecía más pegado a la línea defensiva que de costumbre y con Beñat tan oscilante de una banda a otra. Sin embargo, fue eso lo que aportó profundidad por las bandas, liberar al vasco en la frontal, y que se evitaban sustos atrás con un falso quinto defensa. Con este sistema y ante un rival que se dedicó a aprovechar el zapatazo a la contra, el Betis llegaba por ambas bandas pero con menor intensidad a la que acostumbran los de Mel.
Cuando ya asomaba el cansancio, el Huesca empezó a ver renta de su estrategia al contragolpe. Justo cuando el Betis bajó el pistón y la falta de compresión entre zaga y medular a punto estuvieron de dar más de un susto a los aficionados del fondo norte de El Alcoraz. La inauguración del luminoso tendría que esperar a la vuelta del descanso.
Enlazó el Betis la tendencia del primer acto con el del segundo, voluntarioso, pero consumando detalles que denotaban los excesos que se produjeron en Getafe. Precisamente por eso llegó el mayor error del partido, que tuvo como castigo el gol del Huesca. Arzu se confió en el pase vertical hacia Nacho y Jokin, que siempre fue un incordio para el conjunto verdiblanco, sacó petróleo para poner un centro raso a Camacho, quien superó a Goitia.
Pero, ironías de la vida, fue concretamente ese tanto el que espoleó al Betis, que se fue arriba con todo y sólo tres minutos después del mazazo oscense llegó la redención para el central nazareno, con el definitivo gol del empate tras una falta brillantemente botada por Israel. El gol fue la gota que despertó el espectáculo, convirtiendo el partido en un toma y daca constante. El Betis creaba cada vez más rápido y el Huesca sacaba tajada de las carencias defensivas y haciendo trabajar a Goitia.
Con el pitido final y a pesar del tropiezo, el empate es un justo premio, no sólo para los sevillanos, sino también para los locales, que encontraron el modo de plantar cara a un equipo claramente mermado por la fatiga de la Copa del Rey.
Alineaciones:
Huesca: A. Fernández; Molinero, Corona, Luis Helguera, Marcos; Sorribas (Galán 73′), Sastre (Echaide 66′), Esparza (Gallardo 66′), Camacho: David Bauzá, Roberto.
Real Betis: Goitia; Isidoro, Arzu, M. Roqué, Nacho; Iriney, Beñat (Ezequiel 67′), Juande (Cañas 74′), Israel; Jorge Molina y Rubén Castro.
Goles: 1-0, m. 53: Camacho; 1-1 m. 56: Arzu;
Árbitro: Amoedo Chas. Colegio gallego. Amonestó a Nacho, Sastre, Iriney, Sorribas, Helguera, Beñat y Echaide.

Noticia por Miguel Rolle
Periodista Manque la crisis. En busca de la piedra filosofal que me muestre cómo vivir de mi sueño. Hasta entonces, trabajo y esfuerzo son mis lemas, que ya habrá tiempo para dormir cuando el tiempo se acabe.