El mejor de los rivales: Iago Aspas
La Navidad, sin duda una de las épocas preferidas por la mayor parte de los habitantes del planeta tierra. Es el momento en que, normalmente, nos reencontramos con viejos amigos, las reuniones familiares se hacen habituales y, lo que es más importante, la mayoría de nuestros sueños y deseos pueden hacerse realidad…
En Sevilla, al menos en el bando verdiblanco, las fiestas se esperan con ilusión aunque hace tiempo que la sonrisa se hizo imborrable en la mayoría de los aficionados. El equipo va a más y en este momento, a diferencia del pasado, se muestra una seriedad que permite levantar los partidos cuando más cuesta arriba parecen. Eso mismo es lo que ocurrió en Balaídos el pasado Lunes.
En la anterior crónica hable de la peligrosidad de los pupilos de Paco Herrera, un equipo que pese a encontrarse en la mitad baja de la tabla cuenta con nombres y un sistema de juego que debería situarles más arriba.
El Real Betis llegaba al partido con energías renovadas y el ánimo por las nubes tras sus últimos encuentros de Liga BBVA y Copa del Rey. Además, Rubén Castro y Juan Carlos, dos de las piezas fundamentales del equipo, entraban en la convocatoria y finalmente en el once inicial al remitir sus molestias físicas de los últimos días. Todo eran buenas noticias…
El encuentro ante el Celta de Vigo no fue por los derroteros esperados. La teórica superioridad verdiblanca se vio difuminada por un equipo serio, sin fisuras, que bajo el empuje de unos 12.000 animosos aficionados gozaban de las mejores ocasiones. Eso sí, a diferencia de otros encuentros, los de Pepe Mel no perdieron la compostura, aguantaron el chaparrón de ciertas fases del partido y supieron aprovechar sus ocasiones para terminar imponiéndose por 0.1.
Es necesario mencionar el papel desempeñado por Adrián San Miguel, cuyas intervenciones dieron la victoria al equipo, la actuación de Amaya, que ha pasado de prescindible a vital yendo cada día a más y, cómo no, Jorge Molina, autor del gol que hace que el conjunto de Pepe Mel entre en la historia, siendo el mejor equipo verdiblanco fuera de casa a estas alturas de competición. Casi nada…
Del Celta de Vigo debemos de mencionar la gran actuación de Javi Varas, capaz de mantener las ilusiones de su equipo intactas hasta los minutos finales gracias a sus grandes intervenciones. Aunque para este pequeño artículo nos quedamos con Iago Aspas, alma del equipo celtiña y, sin lugar a dudas, su jugador más peligroso.
Iago Aspas Juncal, conocido en el mundo del fútbol como Iago Aspas o simplemente Aspas, nació en Moaña (Pontevedra) el 1 de Agosto de 1987.
Hermano del ex futbolista del Celta de Vigo Jonathan Aspas, es lo que se puede considerar un auténtico jugador de club. Dio sus primeros pasos en el mundo del fútbol en las categorías inferiores del Celta de Vigo, donde llegó con apenas 7 años.
En esa prueba inicial, donde en teoría no podría haber participado por su corta edad, ya despertó la admiración de propios y extraños, que veían en él a un jugador un tanto diferente. Fue avanzando a pasos agigantados en las categorías inferiores, compartiendo equipo con otro de los jugadores insignia del Celta de Vigo, Roberto Lago, y llegando al equipo filial a la edad de 19 años.
Pepe Murcia fue quien le dio su primera oportunidad con el primer equipo, llevándole a hacer la pretemporada en la 2008.2009. Pese a sus grandes actuaciones el técnico no le dio la continuidad deseada, pero lejos de caer o deprimirse el jugador siguió luchando, desde el equipo filial, por obtener una nueva oportunidad.
Su debut con el primer equipo llegó el mes de Junio de 2009, en el Estadio de Balaídos, en el encuentro que enfrentaba al Celta de Vigo con el Alavés, dos conjuntos que debían pelear por la permanencia en Primera División. El técnico celtiña, Eusebio Sacristán, decidió apostar por Iago en el min. 60, cuando peor pintaban las cosas para el equipo local y el jugador respondió de sobremanera, anotando los dos goles en la victoria por 2.1 que resultaría vital para la permanencia del equipo. El debut soñado…
Pese a su juventud ha vivido momentos complicados ya que hasta la pasada temporada nunca había gozado de la continuidad que su juego y rendimiento necesitaba. Aunque ante él han ido desfilando una gran nómina de delanteros como son Bamogo, De Ridder, Manchev, Okkas, Quincy, Ghilas, Papadopoulos, Dinei, Verpakovskis o David Rodríguez.
Es un jugador que destaca por su velocidad, habilidad en el regate e increíble ambición, no se rinde ante nada. Además, con el paso de los años ha ido aprovechando su polivalencia, que viene de su etapa juvenil, ya que puede jugar como delantero, mediapunta o incluso tirado a banda y, sobre todo, aumentando considerablemente sus cifras goleadores, convirtiéndose en la principal arma ofensiva de su equipo.
Por cierto, es necesario destacar su carácter indomable, que ha ido mejorando con el paso de los años. Se cuenta como anécdota su paso por el equipo juvenil del Celta de Vigo, donde no terminaba de despuntar, siendo un suplente talentoso pero poco más que eso. El club le dio la oportunidad de jugar en el Juvenil “B” a lo que Iago se negó, cogiendo su petate y marchándose al Rápido de Bouzas, equipo de barrio que competía con el Celta de Vigo en División de Honor. El enfrentamiento entre ambos conjuntos es recordado. Iago Aspas fue expulsado por encararse con un linier y dedicar gran cantidad de palabras cariñosas y cortes de manga a los aficionados/trabajadores del Celta. A los pocos meses volvió a casa…
Futbolista que aúna casta y técnica, generoso y ganador. Un auténtico diamante que ha renovado con el Celta de Vigo hasta 2017, pero que se encuentra al alcance de cualquiera que pueda abonar sus 10Mill de € de cláusula de rescisión. Un auténtico jugadorazo que hay que vigilar de cerca… TOP.
Juanal Martínez, Sígueme en Twitter: @JLoko7.

Sería una buena incorporación a nuestro club para afrontar la proxima liga.r
Buena incorporación para gran parte de los eQuipos d la Liga BBVA. Enorme jugador! 😉