«Último tren para Nelson», la contracrónica de Pablo Caballero

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El pasado 11 de mayo Nelson cayó gravemente lesionado en un Osasuna-Sevilla. Esa lesión quizá haya provocado que el caboverdiano siga en la plantilla bética al no encontrar equipo que quisiera hacerse con sus servicios en verano por culpa de la grave dolencia del lateral. Ayer volvió a sentirse futbolista a lo grande.
Tras recuperarse para la práctica del fútbol, Nelson tenía la difícil papeleta de hacerse con un puesto en el equipo de Mel. Por todos es sabido que el técnico madrileño no quería a un futbolista que parecía que no estaba implicado en este proyecto. Digo parecía porque ahora las cosas han cambiado. El lateral derecho ha sido un problema para la defensa bética. Ni Chica ni Isidoro han conseguido que esa posición sea fuerte y sólida. La oportunidad se le presentó a Nelson y el internacional portugués no la puede desaprovechar. Si está implicado, en una forma física óptima y el equipo funciona, Nelson es, de largo, el mejor candidato para ese puesto. Ayer consiguió anotar un golazo el último minuto que valen tres puntos de oro. Fue el colofón a un buen partido del lateral, que no pudo contener las lágrimas por la importancia del gol, el calvario sufrido por la lesión y la reciente muerte de su padre.
Con la recuperación de Nelson a Mel se le soluciona un problema. La pelotita está ahora en el tejado del africano. No puede dejar pasar esta oportunidad porque, aunque suene a utopía, incluso puede ser convocado para la disputa de la Eurocopa con Portugal. Si esto ocurre, a parte del jugador, el Betis saldrá beneficiado. Que así sea.