Entrevista Andrés Aranda 1965.

En marzo de 1965 Andrés Aranda se hizo cargo del primer equipo del Real Betis Balompié. Era el tercer técnico que llegaba esa temporada al banquillo verdiblanco, tras las experiencias fallidas con Louis Hon y Rosendo Hernández.
El equipo bético, a falta de 6 jornadas para el fin de la competición liguera, era el 13 clasificado sobre un total de 16 equipos, con sólo 2 puntos sobre el descenso automático, que ocupaban Deportivo y Oviedo, y en una posición que de momento le llevaría a jugar la promoción para intentar mantener la categoría.
Andrés Aranda, el veterano técnico y ex jugador verdiblanco, en ese momento tomó el relevo en la dirección del equipo, aunque por muy poco tiempo dado que fallecería sólo 10 días después de hacerse cargo del equipo durante una concentración en Aracena.
Esta entrevista, a cargo del periodista Juan Manuel Borbujo, se publicó en las páginas del diario vespertino Sevilla el 3 de marzo de 1965.
Andrés Aranda se muestra muy satisfecho de la misión que le ha sido encomendada. Al respecto ha manifestado:
- Ciertamente, como ferviente bético, me hubiera disgustado profundamente si en una situación como ésta, la Junta directiva no se acuerda de mí. Por eso, como sé como me estiman en el club, donde siempre he puesto a contribución los mejores anhelos y afanes profesionales, no me cogió de improviso la designación cuando Rosendo Hernández planteó la dimisión irrevocable
Se le preguntó si se hallaba ilusionado, y comentó:
- Sí que lo estoy. Reconozco las dificultades que hay que salvar en estos momentos y que la situación es realmente crítica, pero la ilusión es el bagaje que nos anima a todos
- ¿Cómo ves al equipo?
- Bien… Dispuesto a rendir al máximo. Los muchachos, con quienes he convivido, se muestran tan ilusionados como yo y creo que con un poco de suerte, el presente problema podemos resolverlo. Depende de la suerte. Nosotros haremos lo importante.
- ¿Crees fundamental mantener la renovación del equipo?
- ¿Qué renovación?
- La introducida últimamente
- Reconozco la valía de los jóvenes que han sido recién adaptados al equipo y haré uso de ellos cuantas veces lo crea oportuno, pero la verdad es que mantendré el clásico armazón, integrado por hombres de clase y experiencia, como lo han demostrado reiteradamente. Con ellos como base y confiando en la honradez profesional de todos—honradez que nunca se debió poner en duda—completaré las formaciones, a tenor de las necesidades y de las condiciones físicas de los muchachos
- Nos parece buena fórmula, pero, según dicen, se anuncian inmediatos refuerzos. ¿Qué hará con ellos?
- Si llegan—y llegarán si interesan—le daré entrada inmediata en el titular, siempre y cuando, claro está, que sus condiciones y las características de los encuentros a disputar lo aconsejen
- Y volviendo a la actualidad, ¿esperas salvar el trance en que se debate el Betis?
- ¡Vamos a intentarlo¡ Insisto, de nuevo, que me encuentro muy satisfecho por el nombramiento de que sido objeto; repito que haremos cuanto humanamente esté en nuestras manos, pues los muchachos colaborarán al máximo y, con un poco de suerte… intentaremos el milagro. Ahora bien, solicito también de los aficionados plena confianza y, esencialmente, que no se dejen arrastrar por esas aseveraciones de los malintencionados y de los que propalan embustes y calumnias, con afanes de desorientar la verdad, en provecho de mezquinos fines. Solicito de nuestros seguidores y simpatizantes, la confianza más absoluta y el mejor aliento para quienes pretendemos resolver la cuestión actual. Ese apoyo moral es el que también ha de influir y de forma muy principal. Sin él, nada haríamos…
- Así lo diremos. ¿Cuándo nos facilitará la lista de jugadores que desplaza a Elche?
- Mañana por la mañana, después de los entrenamientos. Entonces daré la lista y posiblemente el equipo.
- ¿Habrá novedades?
- ¡Mañana, mañana será otro día¡
Y este fue el diálogo sostenido con el flamante entrenador del Betis, bético cien por cien sin lugar a dudas.
Al margen de la entrevista y cuando comparecimos hoy por la mañana en el estadio Villamarín, con tales pretensiones de abordaje, nos llevamos una sorpresa. En la cancha, evolucionando al tiempo que los demás jugadores de la plantilla, descubrimos al ex internacional Mateos, enrolado en las filas del Recreativo de Huelva. En la banda, junto con el secretario técnico bético, estaba también el presidente de dicho club titular de la capital hermana, señor Martín Berrocal. Aquello “nos entró por el ojo” y dejamos hacer. Horas después, conversamos telefónicamente con la Secretaría, con José María De la Concha. Le preguntamos sobre aquel “descubrimiento”. El señor De la Concha fue bien lacónico.
- Por el momento no hay nada. Quizás mañana, a estas horas, posiblemente pueda facilitar noticia
¡Y así está la cosa¡