Motorola, de Eduardo Sacheri
¿A quién no le ha pasado? ¿Quién no ha dicho basta ya de una vez? Tantas ilusiones, tanto cariño entregado, tanta afición y tanta pasión, tantas horas de sufrimiento y desvelo, y todo eso para recibir tan poco: derrotas, falta de entrega, excusas, las típicas declaraciones de siempre: la mala suerte, los chicos lucharon, queda mucho…