«Diecisiete años después aún me recuerdan el gol» (Alfinaldelapalmera)
Koeman, con suficiencia, salta junto a un menudo bético con cara de pillo. El holandés cede el balón hacia Busquets, el portero, que ve cómo no había acertado en su salida y va evitando la caída sin poder alcanzar el esférico. Mientras, el joven verdiblanco con el 11 a la espalda corre con toda la fe del mundo para impulsar la pelota hacia las redes. Era el 3 de febrero de 1994. El escenario, el Camp Nou. El Betis de Segunda dejaba fuera de los cuartos de final de la Copa del Rey al Dream Team de Cruyff, que ese día no sólo alineó a Koeman, sino a Ferrer, Sergi, Guardiola, Nadal, Stoichkov… ¿Quién era ese héroe bético? Pues un gallego que respondía al diminutivo de Juanito y cuyo carnet de identidad señala que se llama Juan Luis Amigo Ferreiro y que hoy, a los 41 años, aún sigue enamorado del fútbol jugando en el Narón de su tierra, que milita en Tercera división.
Ayer, Juanito atendió a ABC de Sevilla mientras se estaba recuperando de la derrota de su equipo, colista, frente al Mesón do Bento (2-4). «Hemos cambiado mucho la plantilla este año y no van las cosas muy bien. A ver si mejoramos en la segunda vuelta». Es titular Juanito, que vive el fútbol como si siempre fuera el primer día: «Me encanta y tuve fortuna con las lesiones. El día que no tenga el gusanillo, tendré que dejarlo. Cada día de partido siento lo mismo, estoy deseando que empiece ya». En el Narón llegó a coincidir con Cuéllar, éste sí ya retirado.
Sólo estuvo seis meses en Sevilla, ya que llegó cedido por el Deportivo en enero y se marchó tras el ascenso. «Todos los recuerdos que tengo de Sevilla son preciosos. Cuando llegué estábamos sextos, empezamos a remontar y en la Copa nos fue muy bien. Ascender y llegar tan lejos en la Copa fue algo inolvidable. El vestuario era formidable, la afición increíble… Tengo un montón de imágenes, ese recorrido desde Santa Justa hasta el estadio con todas las calles llenas… Hay momentos que quedan ahí para toda la vida y uno de ellos es mi estancia en el Betis», afirma el gallego.
Pero a los béticos se les quedó grabado a fuego su nombre por aquel gol en Barcelona. «Por aquí también me lo recuerdan tanto los aficionados del Barcelona como los del Madrid. Veré el partido con algunos amigos que son del Barça. Mis dos hijos también lo son, por cierto, pero no porque yo lo sea, que conste. No soy de ningún equipo en especial. Me gusta que ganen aquellos donde yo he jugado y los que practican buen fútbol», dice antes de hacer memoria y poner en pie lo que supuso aquello: «Era el primer partido que jugaba de titular en el Betis y me llegaba después de año y medio casi sin jugar en el Dépor. Fue un día inolvidable y la gente, ya de paso, te lo recuerda cada dos por tres. En el momento del gol solté toda la rabia contenida y después del partido estaba como en una nube. ¡Habíamos eliminado al Barcelona! Y son todo felicitaciones. No nos lo creíamos, en serio. A los tres días teníamos partido en Villarreal, que por cierto perdimos, y teníamos entrenamiento al día siguiente en La Masía. El fútbol no te permite disfrutar mucho de esas cosas, no es como un ascenso. La noche sí fue especial porque me llamaron muchos amigos y familiares, pero había que seguir currando pronto».
Similitudes
Y ve un paralelismo con la situación actual. «El Betis estaba en Segunda, como ahora, luchando por los primeros puestos y aquel Barcelona era el Dream Team, un equipo que jugaba mejor que nadie y conseguía muchos títulos. Ojalá vuelva a suceder lo mismo», dice. ¿Y quién será el nuevo Juanito? «No sé. El Betis tiene que intentarlo, aunque el Barcelona este año no pierde con nadie». Pero eso sí, su voz de la experiencia marca la realidad bética para esta temporada. «Aquí seguimos más lo que hace el Celta, pero desde la distancia veo que el Betis está un puntito por encima del resto. Si sigue en esa línea puede ser el primero. Es el candidato más fiable. La Copa ilusiona y viendo el rival que les ha tocado deben salir a muerte e intentarlo, pero el objetivo principal del Betis es volver a Primera, lo mismo que sucedió aquella temporada tan maravillosa».
vía «Diecisiete años después aún me recuerdan el gol».