Agra se enfrenta a su pasado
Esta tarde se enfrenta el Real Betis frente al Olhanense a las 20:00 horas en Cartaya, en el estadio Luís Rodríguez Salvador, en el que será el segundo partido de preparación en la pretemporada, tras el disputado el pasado sábado en Valverde frente a la Olímpica Valverdeña.
El partido no cobraría mayor importancia de la que tiene un amistoso si no fuera porque Salvador Agra, actual jugador del Betis, se enfrentará a su ex equipo hasta la pasada temporada.
Será un partido especial para el extremo portugués porque, a pesar de que solo estuvo una temporada en el conjunto de Olhão, ahí fue donde Agra empezó a darse a conocer como futbolista y a mostrar su cualidades: rapidez, desborde y empeño, mucho empeño.
Agra llegó al Olhanense procedente del Varzim, equipo donde se formó y del que salió tras descender a la tercera división portuguesa. Tras el descenso, Salvador aceptó la llamada del Olhanense, el cual lo fichó para suplir la baja de Paulo Sergio.
Pero a pesar de ser una de las caras nuevas de la plantilla, con todas las dificultades de adaptación que ello conlleva, Agra se consolidó en el equipo y ya en las primeras jornadas empezó a destacar, siendo fijo en las convocatorias.
Su presencia en el Olhanense, equipo de mayor nivel que el Varzim al estar en la Primera División portuguesa, le vino bien a Agra, ya que, dada la expectación que estaba levantando, tendría en frente a equipos fuertes como el Benfica o el Oporto.
Y cumplió. Demostró que no se achica ante los grandes, que lo intenta una y otra vez hasta que se sale con la suya, además de que, aparte de saber jugar en el ataque, también colabora atrás cuando la situación se complica.
Esto hizo que el Real Betis se interesara por él, y que finalmente lo fichara. Pero no solo el interés verdiblanco, sino también el de la selección sub-21 portuguesa, con la que ya ha disputado algunos encuentros y ha despuntado gracias a sus habilidades.
Esta tarde, Agra verá por primera vez como rivales a los que hasta hace muy poco eran sus compañeros de equipo, aquellos con los que disfrutó y gozó de una buena temporada, algo que hoy desea, pero ya como jugador verdiblanco.