Betis, no más fugas de cerebros
El caso de Dani Ceballos ha hecho mucho daño. Es difícil digerir que un valor de la cantera vuele dejando tan poco rédito en las alforjas verdiblancas, pero lo que ha pasado debe servir para aprender.
Gran parte de la grandeza del Betis viene de sus canteranos, y es por ello que el beneficio de la cantera tiene que ir al Betis, y si no, que paguen lo que vale. Ceballos es la punta del Iceberg, pero tenemos recientemente a Abeledo en el Barça, a Toni Segura en el Madrid, y algunos más que ahora no recuerdo.
No es solo que no sabemos atar sus cláusulas de rescisión, ese es el detalle final, es que para ellos no es atractivo quedarse en el Betis. Duela o no, ese es el principal problema. El Betis no tiene una buena gestión de la cantera hace tiempo que nuestras categorías inferiores no son nada, nos guste o no, y hace tiempo que en la cantera no siempre llegan los mejores al filial por mafias de representantes.
Señores Haro y Serra Ferrer, presidente y presidente deportivo, hace mucho que el manejo de la cantera verdiblanca deja mucho que desear, hace mucho que no se gestiona bien que los chavales sueñen con llegar al Betis, y hace mucho que no se negocia bien con los representantes de los futbolistas.
El Betis no se puede plegar ni a agencias tipo Bahía, ni a que la gestión de la cantera se lleve como si fuera el bar de unos colegas. Hay que poner seriedad, trabajo, ilusión, y normas estrictas, para que se sepa que el Betis no es el vivero de nadie y que esa cantera se respeta.
Hasta que las categorías inferiores no se gestionen correctamente, y eso implica quitar a los que hace años están allí, no volveremos a ser un equipo respetado.