Conoce a Dani Giménez, el seguro de la regularidad

Dani Giménez dando instrucciones a su defensa durante un encuentro.
Foto: lfp.es

Con la acordada continuidad de Adán, aunque cada vez más insistentes son los intereses de otros clubes por llevarlo a formar parte de sus plantillas, el Real Betis Balompié buscaba con insistencia un segundo portero para formar parte de la plantilla. Una plantilla en la que el tercer portero será Pedro, aunque lo ideal sería quizás que el canterano cogiese todos los minutos posibles para no frenar su evolución, algo que no parece que vaya a conseguir este año en el club verdiblanco.

Lo cierto es que el Betis ha buscado en este caso un portero con experiencia, conocedor de la Liga Adelante, en la que ha disputado esta última temporada y con unos números y rendimiento bastante decente en la categoría. Hablamos de Daniel Giménez Hernández (Vigo, Pontevedra, España, 30 de julio de 1983).

Dani comenzó su carrera en el filial del Real Club Celta de Vigo, para acabar fichando en 2004 por el Zamora. Tras varios años en la portería zamorana ficha por el Rayo Vallecano aunque no encontró nunca la regularidad que deseaba en su etapa en el cuadro madrileño. De esta forma esta pasada temporada cambió la camiseta franjirroja por el amarillo del Alcorcón, equipo en el que ha disputado 47 encuentros, todos ellos como titular y con un bajo promedio de goles encajados, lo que lo convierte en una alternativa fiable para la categoría.

Virtudes y defectos:

Dani Giménez es un portero bastante sólido, de 1.82 metros y 77 kg. Entre sus principales virtudes está la colocación, que gracias a su ya dilatada experiencia sobre el terreno de juego suele ser bastante correcta y sobretodo la rapidez. No es un portero que regale rechaces fáciles y eso siempre es positivo. No suele tener problemas en blocar además de ser bastante rápido para atrapar y distribuir, favoreciendo el posible contragolpe.

Esa rapidez de movimientos y reflejos, hace que se sienta incluso más cómodo en el uno contra uno que con los remates desde larga distancia. Es un portero muy ágil, rápido en sus reacciones, en levantarse para volver a atajar y que no duda en utilizar los pies para salvar una posible ocasión del rival.

No obstante, no todo van a ser pros, y entre los defectos de Dani podríamos señalar su envergadura, que hace que no sea tan seguro en el juego aéreo. A veces pasa bastantes apuros ante rivales con un buen juego aéreo y su fútbol con los pies tampoco es especialmente bueno. En comparación con Adán, que será su rival en el puesto salvo una inesperada salida, el ex jugador de Cagliari y Real Madrid es algo superior en ese aspecto. Quizás en lo que si ganaría Dani Giménez es en los reflejos, ya que es una de sus mejores cualidades, lo que a vece aporta paradas de mérito. Su agilidad lo hace un portero bastante espectacular en ocasiones, aunque no es ningún secreto de que, a priori, será suplente de Adán, y más aún tras la importancia adquirida en el club con esta última temporada.

Un portero de ciertas garantías para la categoría que el Betis disputará cuando empiece la temporada y un pequeño «lujo» para tenerlo en el banquillo. El fichaje, a coste cero, parece en principio una buena incorporación por parte de los verdiblancos.

Noticia por Jorge M. González

Apasionado del fútbol internacional y Social Media Manager. Me gusta seguir ligas extranjeras y a las jóvenes promesas de todo el mundo. Sígueme en twitter para compartir afición: @jorgegonex

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