Previous Story
Juanma Henares: Cuando un sueño se convierte en pesadilla
Juanma Henares es el protagonista de la historia que nos ha dado a conocer Manuel Manquepierda a través de Betisweb. Foto: Betisweb
Cuando en noviembre de 2011 llega a los oídos de Juanma Henares que el Real Betis tiene intención de ficharle, al joven se le iluminó la mirada:
“Supone la recompensa a un gran esfuerzo y un gran sacrificio […] Era uno de mis sueños el dar este salto y por tanto estoy muy agradecido al Betis”, reconoce el propio Juanma en una entrevista concedida el pasado verano a Manuel Manquepierda para Betisweb. No sabía todo aquello por lo que tendría que pasar, meses después.
Sus cualidades futbolísticas le llevaron a golear en con el cadete preferente de la UD La Mosca. Nada menos que 85 goles. Juanma, natural de Álora (Málaga), se autodefine como un “delantero con mucho gol, potente, fuerte físicamente y nada egoísta”.
Cualidades que pese a sufrir de diabetes, no le impidieron dar el salto definitivo al Betis avalado por dos nombres: Jesús Sánchez, coordinador de cadetes del Betis en 2011, y Aurelio Santos, coordinador de juveniles en el mes de julio en que Juanma sella su acuerdo.
Por el camino quedaron los cantos de sirena de Málaga CF y FC Barcelona. Dos clubes que le tentaron poco después de que el Betis le viera. Su deseo era triunfar en el Betis.
Pero como avanzó ayer Manuel Manquepierda en Betisweb, la historia dejó de ser idílica para convertirse en un vía crucis. Nada más comenzar los entrenamientos de la temporada 2012/13 con el Juvenil Preferente, Juanma sufre en casa una fístula y se le impide continuar su preparación en Sevilla.
El Betis exige la revisión de un especialista externo al club para determinar la gravedad de dicha fístula. Algo que nada tiene que ver con la atención médica privada que el club garantizaba a Juanma como futbolista del Betis, según las mencionadas fuentes.
Tras casi medio mes de parón, una clínica privada certifica que tal fístula no supone un problema para su normal actividad deportiva y el delantero disputa 25 minutos en un amistoso con el Betis. El mal trago parecía haber pasado.
Pero no fue así. Apenas habían pasado unos días de su regreso al trabajo como jugador verdiblanco, su sueño, y Juanma es declarado ‘no apto’. El motivo fueron unos exámenes que desvelaron niveles peligrosos relacionados con su diabetes y que ponían en riesgo su salud.
Desde ese momento, su familia debe encargarse una vez más de encontrar y pagar un endocrino que trate a Juanma hasta su recuperación. De nuevo, sin noticias de aquella asistencia médica privada.
Pero un mes después, y con lo que deportivamente supone para un futbolista de 16 años, un endocrino certifica ante un enfermero en representación del Real Betis que Juanma puede practicar deporte a cualquier nivel si mantiene equilibrados los niveles de azúcar en sangre. Un diagnóstico en contraposición al ‘no apto’ por parte del Betis y que supone el alta deportiva.
Sin embargo, el error que iba a abocar a Juanma, varios días después, a desvincularse definitivamente del Betis, estaba a punto de irrumpir.
Y es que, como cuenta Manuel Manquepierda en su artículo, la diabetes no constaba como parte del historial de Juanma en los servicios médicos del Betis hasta las pruebas que le declararon no apto el pasado mes de agosto.
Un punto de desconocimiento arduo de comprender si hablamos de un equipo de la extensión y calado del Betis y que alcanza hasta el propio coordinador de la cantera, quien, según dicha fuente, no tenía constancia que las últimas pruebas médicas, del 19 de septiembre.
Tal situación aboca a Juanma, quien tenía entre sus sueños crecer y triunfar en el Betis y por el que ha rechazado propuestas de Málaga y FC Barcelona, a romper toda actividad con el Betis. Es la forma de convertir un sueño en pesadilla.
SÍGUEME EN TWITTER: @MikiHendrix
Noticia por Miguel Rolle
Periodista Manque la crisis. En busca de la piedra filosofal que me muestre cómo vivir de mi sueño. Hasta entonces, trabajo y esfuerzo son mis lemas, que ya habrá tiempo para dormir cuando el tiempo se acabe.
