Pozuelo´s Party, por Miguel Cejudo
Recital del trianero en el reencuentro con la victoria del equipo de Oli, en una mañana desapacible en lo meteorológico. El conjunto verdiblanco logró romper el maleficio de muchas jornadas sin llenar el zurrón de puntos.
Empezó con dudas el Betis, provocando una falta pintiparada para el juego que deseaba ofrecer el Lorca, es decir, balón parado. Eso fue al primer minuto y ahí se acabo el potencial ofensivo murciano.
El Betis comenzó a mandar en el partido pero sin profundizar, el nuevo sistema de Oli con tres centrales y dos laterales muy ofensivos le permitía ocupar una gran parcela del terreno de juego, ya que los lorquinos apenas inquietaban y se encerraban atrás buscando una contra de Antonio o Meca o una jugada a balón parado.
El dominio territorial del Betis obtuvo su fruto cuando apareció Pozuelo, aprovechando un buen pase de Bernal. En una gran maniobra de reverso se ganó el espacio suficiente para poner en bandeja el balón para que Agudo gustoso aprovechase el regalo en boca de gol.
Se alcanzó el descanso y en la reanudación se agigantó la figura de Pozuelo, con un recital de pases, taconazos y amagos que hicieron las delicias del poco público congregado en la Ciudad Deportiva. Una gran jugada suya, tras fallo de la defensa, provocó un nuevo pase-regalo a Agudo al que éste no hizo ascos y dobló la ventaja en el marcador.
A los pocos minutos Agudo, claramente en deuda con el trianero, le regala un pase que lo deja sólo y éste devuelve el regalo a la grada y las cámaras y mete un gol de dibujos animados. En definitiva, buen partido del Betis B ante un pésimo rival y reencuentro con la victoria y en fases con el buen juego.