Resumen de la primera vuelta: Comienzo poco alentador, cambios, Merino-Mel y tranquilidad
El pasado fin de semana, el Real Betis terminó la primera vuelta de la Liga Adelante de la mejor forma posible: victoria ante un rival directo por el ascenso, el Sporting (1-2), sensaciones muy positivas sobre el campo, una perfecta comunión con la parroquia verdiblanca, liderada principalmente por la vuelta de Pepe Mel al equipo verdiblanco y el equipo en puestos de ascenso directo a la Liga BBVA.
Pocos o muy pocos podía esperar un cambio tan drástico de resultados en los heliopolitanos visto el nivel mostrado en las primeras jornada de competición con Julio Velázquez ya que, a pesar de ser el equipo con el mayor presupuesto de la categoría y, posiblemente, con la mejor platilla de los veintidós componentes de la división de plata del fútbol español, el técnico salmantino no consiguió sacar partido de esta en su corto periplo en Heliópolis, mostrando un juego muy pobre y aburrido donde, además, los resultados no acompañaban, algo que acabó desesperando e impacientando a la afición verdiblanca a las primeras de cambio.
Meses convulsos los que se vivieron en el entorno verdiblanco en las primeras jornadas ligueras. Nada acompañaba: ni juego, ni resultados ni decisiones por parte del consejo. El Villamarín pedía al unísono cambios en la entidad ya que, tras un año de despropósitos como el vivido la campaña pasada, donde los verdiblancos acabaron descendiendo con una paupérrima cifra de puntos, además de una imagen de muchos de sus componentes nada profesional, la afición heliopolitana no estaba dispuesta a permitir un nuevo descalabro.
Sea como fuere, una sonrojante derrota en el Benito Villamarín ante el Deportivo Alavés (1-2) sería la gota que colmara el vaso y el último suspiro de Julio Velázquez en el banquillo del Real Betis Balompié. Pero quizás esta fuera una decisión demasiado difícil de tomar para un Domínguez Platas que, visto lo visto, decidió bajarse del barco antes de tiempo y dejar toda la responsabilidad al nuevo consejo.
Llegó Juan Carlos Ollero a la presidencia y, con él, Juan Merino. El técnico del primer filial verdiblanco, con una magnífica trayectoria con los jóvenes canteranos heliopolitanos, se echaba encima la enorme responsabilidad de levantar la moral de un equipo que andaba sin rumbo, perdido y sin ideas por la Liga Adelante. En este mismo momento comenzaría la racha que ya dura siete jornadas.
Cuatro jornadas al mando y cuatro victorias. Doce puntos de doce y admiración de todo el beticismo. Quizás no vimos el mejor juego, pero pudimos ver impregnado en los futbolistas verdiblancos la garra que un día ofreció Merino como jugador del equipo verdiblanco, algo que el bético agradeció tras muchas jornadas de inoperancia y frialdad.
Por todos era sabido que Juan Merino duraría pocas semanas al mando del primer equipo verdiblanco, a pesar de su bagaje de resultados, ya que el nuevo consejo andaba inmerso en la búsqueda de un entrenador para que, así, Merino regresará al filial. Pero esta situación fue aprovechada para hacer un guiño a la afición verdiblanca y, de entre los muchos candidatos, donde aparecieron nombres como el de Sandoval, Fernando Vázquez… el consejo decidió apostar de nuevo por Pepe Mel, tan sólo un año después de su destitución.
Pocos peros a la decisión de la zona noble del Benito Villamarín, que veía en el madrileño la perfecta opción para volver a unir a toda la afición verdiblanca. Así, tras cosechar un empate a cero en Santo Domingo ante el Alcorcón, los verdiblancos suman dos victorias consecutivas (seis en las últimas siete jornadas) ante Tenerife (3-1) y Sporting de Gijón (1-2), lo que les ha servido para dar un tremendo golpe encima de la mesa y situarse en la segunda posición de la tabla clasificatoria.
Luces y sombras en una primera vuelta marcada por los numerosos en la entidad. Quizás, los malos momentos de las primeras jornadas de liga ya han quedado olvidados, ya que toda la plantilla verdiblanca muestra síntomas de que todo ha mejorado, comenzando por la línea defensiva, con un Jordi Figueras que se encuentra en su mejor momento desde que llegara a Heliópolis y con un Bruno que se ha dado un paso adelante para ser el mejor central del equipo verdiblanco.
Además, la llegada de Dani Ceballos al once titular verdiblanco ha supuesto un gran plus para el equipo. Sin duda, una de las mejores noticias de esta primera vuelta, ya que ha dotado al equipo de esa creatividad que tanto añoraba y que no supo ofrecer Matilla, además de encarnar lo que supone llevar las trece barras en el pecho. Esto, unido a la muy enchufada línea de ataque verdiblanca, con Rubén Castro como pichichi de la categoría con quince goles y Jorge Molina en un gran estado de forma, han hecho de los verdiblancos, ahora sí, el rival más temido de la categoría.
Veintiuna jornadas por delante y un único objetivo: el ascenso a Primera División. Comienza la cuenta atrás…