Seguridad defensiva muy tardía
El Betis ha empatado a cero en Elche y se aleja un punto más de los puestos de salvación. La mejoría defensiva es evidente, pero hay que ganar los partidos para recortar la distancia con respecto a los rivales. Hay que dar saltos en lugar de pasos. Y es que la seguridad defensiva del Betis ha llegado muy tarde. Calderón llegó al club cuando éste ya estaba herido de muerte. En los diez partidos que quedan se intentará el milagro de la salvación, pero parece complicado. Lo que es innegable es la mejoría del equipo en la retaguardia. En los últimos siete partidos (tres de Europa League y cuatro de Liga), el Betis ha encajado cuatro goles. De éstos, tres han sido de penaltis que eran inexistentes y el otro gol encajado se produjo cuando el Athletic de Bilbao jugaba con dos futbolistas más sobre el césped. Recibiendo tan pocos goles es normal que se ganen más partidos o, por lo menos, que no se pierda tanto. Ojala que la dinámica siga igual en la próximas jornadas pero que se vea acompañada de más mordiente en la vanguardia de los verdiblancos. Quedan diez partidos para el final de Liga y hay que ganar, al menos, seis. La empresa es muy, muy, muy complicada. Dejando la portería a cero será menos difícil. Lástima que esta solvencia atrás haya llegado tan tarde.