Un empate para nada Bueno (2-2)
No levanta cabeza. El Real Betis no logró pasar del empate ante el Rayo Vallecano en un partido sin fortuna (2-2). Con Rubén Castro, los verdiblancos jugaron más y mejor que los madrileños, que acumularon toda su fortuna en las botas de Bueno. Otro mazazo más.
Nadie se esperaba tal desenlace después de la primera parte de partido. Quizá fuera la imperiosa necesidad de sumar de tres en tres o la presencia de un futbolista tan peligroso como determinante como es Rubén Castro. El caso es que el Betis comenzó mandando en el campo y las sensaciones transmitían el optimismo perdido hace meses.
Los verdiblancos firmaron un primer acto que recordó a la temporada pasada. Juego atractivo con, ahora ya sí, ocasiones de verdadero peligro. Heliópolis agradecía una matinal de buen fútbol y, por fin, de goles, porque en una de las acciones a balón parado Amaya trasladó la superioridad de juego al marcador. Un luminoso que incluso fue demasiado corto al descanso.
Aquello sería poco después, la clave de un injusto 2-2. Porque aún quedaba ratificar el cambio durante la segunda parte y a pesar de que hubo continuidad, con un Betis al que el larguero le negó el 2-0, fue el Rayo el que pegó mejor, que nunca más. Empate afortunado para el cuadro madrileño.
Desgraciadamente, el gol del Rayo se tradujo en nervios y presión para un Betis que ya vive sumido en un ambiente de tales características. Y es que la puñalada de Bueno a la portería verdiblanca convirtió a los visitantes en el auténtico dueño del partido.
La grada dejó clara su posición al respecto. Ganar, ganar o ganar, eso era lo mínimo que esperaba el beticismo. Costó que ocurriera pero el Betis respondió. En una internada por banda de Juan Carlos, Rubén Castro forzó la salida de Cobeño y el rechace de la pugna brincó un balón en bandeja a Verdú, que desde fuera del área, no perdonó.
El tiempo se agotaba, parecía que el Betis se llevaría el ansiado triunfo, sobre todo después de que Rubén Castro tuviera dos claras ocasiones donde escaseó la fortuna, pero no. Un fallo de Jordi Figueras en el tiempo de descuento que se tradujo en el segundo de Bueno. Mazazo.
El Betis firma un empate que vuelve a saber a derrota. La vuelta de Rubén Castro aportó su granito de arena para cambiar la imagen de un equipo sin gol. Ya lo dijo el ariete canario al final del partido. El Betis vuelve a perdonar para volver a pagarlo caro.
Ficha Técnica:
Real Betis: Sara; Juanfran, Amaya, Jordi, Nacho; Lolo Reyes, Nono, Salva Sevilla (Juan Carlos, min. 58), Vadillo (Chuli, min. 66); Jorge Molina (Verdú, min. 56) y Rubén Castro.
Rayo Vallecano: Cobeño, Tito, Saúl, Galeano, Nacho, Baena, Trashorras (Adrián, min. 63), Viera, Lass, Falqué (Bueno, min. 23) y Larrivey (Nery Castillo, min. 69).
Goles: 1-0, Amaya (min. 26), 1-1, Bueno (min. 51), 2-1, Verdú (min. 80), 2-2, Bueno (min.90).
Árbitro: José Antonio Teixeira Vitienes (árbitro cántabro). Mostró tarjeta amarilla a Saúl Ñíguez, Baena, Larrivey, Viera, Nono, Chuli, Lolo Reyes,
Incidencias: Estadio Benito Villamarín. Aproximadamente unos 33.000 espectadores.
Noticia por Miguel Rolle
Periodista Manque la crisis. En busca de la piedra filosofal que me muestre cómo vivir de mi sueño. Hasta entonces, trabajo y esfuerzo son mis lemas, que ya habrá tiempo para dormir cuando el tiempo se acabe.