¿Verde o Blanco? Las declaraciones de Fabricio
El portero del Real Betis Balompie, Fabricio, fue entrevistado antes de ayer por el programa La jugada de Canal Sur. Entre las preguntas y respuestas del cancerbero hubo una que despertó cierto revuelo entre el beticismo, tanto entre los oyentes del programa como en redes sociales con Twitter.
En esa pregunta se insinúa que el Real Betis decide, en el partido ante el Real Sporting de Gijón en el Molinón la pasada campaña, levantar el pie del acelerador y dejarse ir ante la necesidad de puntos de los asturianos y la salvación prácticamente asegurada de los verdiblancos.
Fabricio no afirma ni desmiente la insinuación e intenta salvar la pregunta con un escueto «no me acuerdo, y si pasó no quiero acordarme». Cabe recordar que en aquel partido el cancerbero fue relegado a la suplencia para que volviese a jugar Casto.
¿Eran necesarias las declaraciones de Fabricio?
A favor: Fabricio sólo fue sincero
A ver Miguel, estoy de acuerdo en que esas supuestas directrices que hablan de apartar el pie del acelerador no le vienen bien al equipo, que las declaraciones llegan en mal momento con el ambiente tan enrarecido por los resultados y que al Real Betis pueden no sentarle bien. Así mismo hay que aplaudir la sinceridad de Fabricio, y su profesionalidad al negarse a no competir al cien por cien.
El problema es que el Real Betis fue al Molinón con opciones de entrar en puestos de Europa League al final de la campaña y eso hace que «dejarse ir» sea un hecho de mayor gravedad, porque entra en juego la profesionalidad y la ambición de futbolistas, cuerpo técnico y estamentos del club.
Probablemente no estuvo fino Fabricio con sus declaraciones desde la perspectiva bética, pero en el trasfondo, el tema que realmente importa es, ¿está bien que un club con matemáticas opciones europeas se deje ir por el motivo que sea? Yo creo que no, y si realmente aquello pasó, me gustaría saber toda la verdad para poder pedir responsabilidades. Hay que competir hasta el final y siempre por lo máximo, sin escusas de ningún tipo.
Jorge M. González
En contra: «La ropa sucia se lava en casa»
Querido Jorge, el refranero es sabio cuando dice que “la ropa sucia se lava en casa”. Partiendo de la hipótesis de que Fabricio supiera que la intención aquel día en El Molinón era “jugar relajado”, algo que ni confirma ni desmiente, hablamos de cuestiones que no harían bien a una entidad deportiva como el Betis.
Estas cosas pasan desde que el fútbol es fútbol. Existe legislación, pero evadirla es tan fácil como poner un partido a las 23.00 horas. El Betis estaba salvado y en Gijón se jugaban la vida. Ganar les daba opciones y recibir un gesto así lo valora el rival, de cara al futuro.
No apruebo pactos previos para ‘echar un guante al prójimo’, pero si nos vamos al supuesto de que se hacen, se barre para casa. Se puede estar más o menos de acuerdo con el club que te paga, pero es el que lo hace. Ojo, podría dejar de hacerlo.
Desvelar algo así no aporta nada bueno. El club, sea el Betis, la Real Sociedad o el Barakaldo, vería dañada su imagen, sus relaciones institucionales e incluso, su permanencia en la categoría. Mucho que perder, nada que ganar.
Miguel Rolle