[VIDEO] La ‘Mano de Dios’ de Molina: recuerdo del último duelo copero entre Atlético de Madrid y Betis
La designación de un colegiado tan poco querido en Heliópolis como en la Ribera del Manzanares, Undiano Mallenco, ha sembrado de escepticismo la ida de Cuartos de Final de Copa del Rey. Un duelo cuyo último recuerdo también tuvo su ración de polémica.
El 16 de enero de 1996, el Atlético de Madrid que sería capaz de conquistar Liga y Copa visitaba a un Real Betis que había sacado petróleo del Vicente Calderón (1-1). Sólo hacía falta rentabilizar el partido y Lorenzo Serra Ferrer, técnico del Real Betis, sabía cómo hacerlo.
Planteó un equipo de gala, con nombres tan destacados como los de Jaro, Vidakovic, Olías, Roberto Ríos, Jarni, Stosic, Juanjo Cañas, Alexis y Alfonso, entre otros y pronto salió en busca de un gol tempranero que pusiera las cosas difíciles, pero se torcieron.
Aquel Atlético de Madrid presumía de ser letal a balón parado y lo demostró en Heliópolis. Primero, Geli adelantó a los suyos tras un córner de Pantic que no fue bien rematado en primera instancia. Después, con un desmarque milimétrico que convirtió Penev.
Pero antes de que el marcador se moviera, el Betis pudo cambiar el rumbo del partido. Con el 0-0, un balón largo de Alexis describió una parábola perfecta hacia el desmarque de Juan José Cañas, quien se encaminó hacia la portería de Molina.
El guardameta no se lo pensó dos veces y salió del área para despejar el peligro. Cañas estuvo atento y con un sutil toque trató de sortear por alto a Molina. Estaba superado pero se sirvió de su puño derecho para despejar a la banda:
Aquella especie de ‘Mano de Dios’ le salió perfecta. El árbitro, que no pudo verlo con claridad, interpretó que despejó con la cabeza y eso evitó que el Atlético se quedara con un hombre menos. Algo que, en mayor o menor medida, suele afectar al desarrollo de los partidos desde el instante en que se produce.
Tampoco es menos cierto que el Betis pudo llegar a empatar e incluso a remontar la eliminatoria, pues contó con más de cuatro claras oportunidades de gol antes de que Juan Sabas acortara distancias con el definitivo 1-2.
Aun así, el Betis tuvo la oportunidad de establecer el 2-2 si el colegiado hubiera acertado en señalar un claro derribo en el área del Atlético de Madrid cometido sobre Alfonso Pérez. No sólo no fue así, sino que Juan José Cañas vio una tarjeta amarilla por sus airadas protestas.
¿Qué hubiera pasado si el árbitro hubiera llegado a ver aquella mano fuera del área de Molina? ¿Habría remontado el Betis si se llega a señalar aquel penalti? Jamás se sabrá. Lo único que es seguro es que al último duelo copero entre Atlético de Madrid y Real Betis no le faltó la pizca de polémica.
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Noticia por Miguel Rolle
Periodista Manque la crisis. En busca de la piedra filosofal que me muestre cómo vivir de mi sueño. Hasta entonces, trabajo y esfuerzo son mis lemas, que ya habrá tiempo para dormir cuando el tiempo se acabe.