El mejor número 10, Cardeñosa.

A finales del año 1977 la revista deportiva Don Balón eligió, con el asesoramiento del ex futbolista azulgrana Josep María Fusté al mejor número 10 del fútbol español.
El elegido fue el centrocampista bético Julio Cardeñosa, que estaba en el momento álgido de su carrera deportiva, y que un mes antes había debutado con la selección en la partido decisivo jugado en Belgrado contra Yugoslavia para la clasificación para el Mundial de Argentina.
A lo largo de los últimos veinte años ha habido en el fútbol mundial una serie de jugadores que con el “10” a la espalda, han sido o aún son los cerebros y conductores del juego de sus equipos. Así, siendo yo un adolescente, recuerdo que admiraba mucho a Luis Suárez, sobre todo. Panizo y Rial de entre los del fútbol español, y de los extranjeros Pelé sin duda alguna, Ademir da Guía (del Palmeiras) y el inglés Duncan Edwards, que fallecería en la tragedia aérea del Manchester United.
Ya como jugador de Primera División, en las filas del Barça, tenía un gran respeto por jugadores como Overath, Rivera, Rivelino, Dumitru, Onega, Van Hanegem, Van Himst y Jokl, un checo del Slovan de Bratislava que quizá conozcan poco los aficionados, pero que a mí me impresionó en algunos partidos que jugué contra él por su gran visión de juego y la habilidad de su pierna izquierda.
Antes de entrar en el análisis individual de cada jugador, quiero expresar que Cardeñosa me parece el más completo de los centrocampistas españoles que llevan el “10” a la espalda, aunque no llegue a la altura de Luis Suárez ni incluso Velázquez.
Me pareció un acierto de Kubala incorporar a Cardeñosa a la selección, en un partido tan difícil y comprometido como fue el Yugoslavia-España, donde creo que, además, cumplió perfectamente con su labor y evidenció una calidad no muy frecuente.
El número dos, sin discusión, se lo daría a Juan Manuel Asensi, que gana en fuerza a Cardeñosa, pero es inferior en técnica y visión de juego. Ambos, sin embargo, pueden jugar juntos, como se demostró en el ya mencionado Yugoslavia-España.
En cuanto a los extranjeros que ocupan ese puesto, me quedo, en cuanto a visión de juego, con Saturnino Arrúa, un extraordinario técnico, aunque menos generoso en el esfuerzo que Stielike. Una simbiosis de las cualidades de estos dos jugadores sería casi la perfección.
Cardeñosa
Visión de juego: 10. Su mejor virtud en el campo. Ve la jugada antes que se produzca.
Técnica: 9. También zurdo, aunque con más habilidad que Asensi en el manejo del balón. Debe mejorar la potencia en el desplazamiento del mismo.
Fuerza: 7. Aunque constantemente atiende al juego de su zona, no es excesivamente fuerte, pero tiene más resistencia de lo que su físico aparenta.