Conflicto con la Federación Regional Sur. 1923
Durante la década los años 20 del pasado siglo los conflictos del Real Betis Balompié con la Federación Regional Sur fueron más que habituales. La parcialidad con la que ésta gobernaba el fútbol en Andalucía produjeron choques frecuentes entre la dirección federativa y el club bético, en una época en la que los organismos regionales del fútbol tenían una autoridad e importancia muchísimo mayor que en épocas posteriores.
Uno de los conflictos que se desarrolló en la temporada 1923-24 es el que vamos a narrar ahora. Presidía la Federación regional Sur Ramón Sánchez-Pizjuán, en representación del Sevilla FC, desde la asamblea celebrada el 9 de agosto de 1923.
En la temporada 1922-23 se disputó la llamada Copa Príncipe de Asturias. una competición jugada por eliminatorias y en la que participaban las selecciones regionales. La Federación Regional Sur, presidida por Juan López García, también ligado al Sevilla FC, presenta una selección compuesta íntegramente por jugadores del Sevilla, que elimina a la de Levante y pierde en semifinales frente a la de Galicia.
Para la temporada 1923-24 la Federación de nuevo elige un once compuesto exclusivamente por jugadores del Sevilla FC, ante la molestia del resto de equipos andaluces, sobre todo el Real Betis Balompié que en esos años es la única alternativa al dominio deportivo del equipo sevillista.
El conflicto salta cuando la Federación Regional Sur de cara a la eliminatoria contra la Federación de Levante, que se tiene que disputar el 11 de noviembre, prepara un partido de entrenamiento para el 14 de octubre para el que cita a 5 jugadores béticos (Jesús, Aranda, Castañeda, Alvarez y Manolín ) para que formen parte de la selección que se ha de enfrentar a la selección de Andalucía, integrada íntegramente por jugadores sevillista.
El Betis se negó a ello y mandó un certificado de enfermedad de todos sus componentes, por lo que hubo que completar el equipo sparring con jugadores de la segunda categoría local. Un paso más en los habituales enfrentamientos del equipo bético ante la parcialidad y favoritismo con el que desde la entidad federativa se gobernaba el fútbol en Andalucía.