Denilson, quítate la presión y sal a disfrutar, de Manuel Ruiz de Lopera.
En agosto de 1997 el Betis fichó a Denilson, un futbolista brasileño de 20 años por el que pagó 5.300 millones de pesetas al Sao Paulo. En ese momento fue el récord mundial en cuanto a traspasos.
No se incorporó a la disciplina bética hasta la temporada 1998-99, después de jugar el Campeonato Mundial de Fútbol de Francia en 1998. Desde su llegada a Sevilla, con una enorme expectación, la polémica estuvo servida y la marcha de Luis Aragonés en ese verano tuvo bastante que ver con la llegada del astro brasileño y las modificaciones que ello iba a producir en la plantilla verdiblanca, como la marcha del croata Robert Jarni, que produjo el enfrentamiento decisivo entre el técnico madrileño y el máximo accionista.
Una vez aparentemente resueltos todos estos problemas, con la llegada sucesiva de 3 técnicos más entre agosto y octubre (Antonio Oliveira, Vicente Cantatore y Javier Clemente), Denilson se integró en la plantilla verdiblanca, debutando en el partido inicial de Liga frente al Deportivo Alavés en San Mamés.
Las jornadas pasaban y Denilson no respondía a ese papel de super estrella con que se le esperaba. Era un buen jugador, con mucha floritura pero poca efectividad de cara al juego de conjunto del equipo. Y los problemas con un técnico de carácter como Javier Clemente no tardarían en saltar.
El texto que hoy traemos a Manquepierda se publicó en el diario deportivo Marca el 12 de diciembre de 1998, el día que el Betis recibía al Atlético de Madrid en el Villamarín. Su autor nada más y nada menos que Manuel Ruiz de Lopera, quien firmó este artículo como expresión de apoyo al futbolista brasileño, que no pasaba por su mejor momento. No marcaría su primer gol, como ya vimos aquí, hasta febrero de 1999.
Como curiosidad Lopera mencionaba en el artículo todo un clásico en sus intervenciones, como era el de las grandes ofertas provenientes de clubs extranjeros deseosos de enrolar a la figura brasileña, un tema recurrente y que nunca se llegó a concretar.
Estimado Denilson:
No sé si vas jugar o no esta noche, porque ya sabes que yo nunca me meto en el trabajo del entrenador. Lo que ahora quiero decirte es que nuestro objetivo es que te sientas como en casa, entre otras cosas porque sabemos que ésa es la manera de que rindas sobre el césped como sólo tú sabes.
Nadie te va a pedir cuentas mañana mismo porque queremos contar contigo para este Betis y para un futuro lleno de alegrías para los béticos. Así que quítate esa presión de la cabeza y sal a disfrutar en el Villamarín o donde sea, siempre dentro de la misión que te encomiende nuestro técnico, algo que ya estás haciendo, según me han dicho y que yo veo. Ese trabajo y esa humildad que estás demostrando van a dar sus frutos, ya lo verás.
Para que lo sepas, tengo sobre la mesa la petición de varios clubes que quieren contar contigo. Y no son clubes del montón. Son la Juventus, el Milán, el PSV, el Ajax y el Inter, que me han dicho que si aquí no te queremos, allí tienes un sitio. Pero tú eres del Betis y aquí tienes que triunfar.
Te has encontrado, además, con un Betis que ha pasado un verano muy movido, con la “fuga” de dos entrenadores, pero tú sabes igual que yo que con Clemente vamos hacia arriba.
Tú sabes mejor que yo que tus compañeros son de categoría y que todos juntos vais a hacer grandes cosas. Dentro de poco llegará tu gran día y espero que sepas dedicarle tu primer gol a esta maravillosa afición que te arropa, a tus compañeros, que quieren lo mejor para ti y para el equipo, a tus técnicos, que buscan la manera de sacarte todo lo que llevas dentro y, ya puestos, a este presidente que va a seguir confiando en ti y que sólo quiere verte vestido de verdiblanco.
Un abrazo.