Donativos para los damnificados de Barcelona. 1962
El 25 de septiembre de 1962 se produjo en las inmediaciones de Barcelona una tremenda riada a consecuencia de las fortísimas lluvias, más de 200 litros por metro cuadrado en poco más de 2 horas en algunos puntos, a consecuencia de la cual hubo casi mil fallecidos, una gran parte de ellos inmigrantes andaluces establecidos en Rubí y Tarrasa.
Hubo diversos actos de solidaridad por todo el país, y uno de ellos tuvo lugar en el estadio Benito Villamarín el domingo 30 de septiembre de 1962, con ocasión del Betis-Málaga de la tercera jornada del Campeonato de Liga de Primera División.
Fueron los jugadores béticos no convocados para el partido los que antes del inicio del encuentro estuvieron solicitando donativos en la puertas de acceso, en favor de los damnificados. Posteriormente siguieron pidiendo para ese benéfico fin en el interior del estadio, como podemos ver a los jugadores Francisco Grau y Helmut Senekowitsch.
