Entrevista Fernando Ansola 1964
En 1964 Fernando Ansola recibió un trofeo otorgado por la «American Football Fans», una organización formada entre los militares norteamericanos de las bases de Morón, Rota y San Pablo, que premió al futbolista vasco por ser un representante puro de lo que se llamaba la «furia española».
Con este motivo el futbolista es entrevistado en las páginas del diario Sevilla por el periodista Manuel Alonso Vicedo, instantes antes de que la expedición bética inicie el viaje hacia Bilbao para enfrentarse al Athletic en San Mamés. Como curiosidad de la época los expedicionarios parten desde la Plaza Virgen de los Reyes, lugar muy cercano a la secretaría bética, por entonces establecida en la calle Alemanes.
En la entrevista se le pregunta a Fernando Ansola por su posible candidatura al Trofeo Patricio Arabolaza, que otorgaba el diario Marca para el jugador que mejor representase el espíritu de esa «furia española», y que llevaba el nombre del jugador del Real Unión de Irún autor del primer tanto de la selección española en los Juegos Olímpicos de 1920 en Amberes. Curiosamente Fernando Ansola recibiría el trofeo en la edición del año siguiente, la de 1965.
Fernando Ansola es el prototipo de la “furia española”. Encarna en su juego las virtudes fundamentales de lo que en Amberes, en 1920, naciera en letra impresa. El jugador que lo da todo. Que se parte el pecho cada tarde, valga el término castizo. Que puede estar bien o mal, pero que nunca se inhibe.
Una organización americana, que agrupa en su derredor a varios cientos aficionados al fútbol de las bases de Morón, Rota y San Pablo, la “American Football Fans”, ha querido premiar a Fernando Ansola como encarnador, según se afirma en la inscripción, de lo más tradicional y puro del balompié hispano, con un artístico trofeo de más de un metro de altura, y que representa la iniciación de una jugada de fútbol americano.
Este galardón supone un éxito íntimo del gran jugador bético. Un gran triunfo. Porque América ha reflejado en él, a través de su representación deportiva en Sevilla, lo mejor del balompié hispano: la furia.
– ¡Taxi, taxi, por favor…¡ ¿Queda libre?
– Podéis subiros. Venía en busca de ti, Fernando…
Esto nos ocurría a las nueve y media de la mañana en Virgen de la Cinta, a la puerta del número 31. Fernando Ansola y José María Montaner aguardaban, con las maletas al lado, el paso de un taxi que les llevase a la Plaza de la Virgen de los Reyes, lugar de cita para la marcha a Bilbao…
– ¿En busca mía?, interroga Fernando
– Sí. Subid, os llevo hasta allá
– ¿Una entrevista?
– ¿Tenías noticias de un trofeo que te iban a entregar los americanos?
Le expliqué que, oficialmente y por medio de la organización “American Football Fans”, se le había concedido por americanos residentes en Sevilla un trofeo, reconocedor de su virtud fundamental como futbolista: la furia. Y a ella unía, según inscripción, la bravura, la honradez y la lealtad.
Fernando Ansola, que es más bien serio y tímido, sonrió. A renglón seguido le mostré el recorte de la información aparecida en nuestro colega ABC, dando cuenta de la concesión, con glosa muy atinada y elogiosa. Se lo dí para su colección.
– Hace unas semanas el cónsul de Filipinas me hizo saber que unos aficionados americanos, que todos los domingos van al fútbol, tenían esta idea. Pero no espera que fuese tan pronto.
– ¿Qué significa para ti el valor simbólico, furia, bravura, lealtad, honradez, de este trofeo?
– Un estímulo para superarme. Es el primero de tipo individual que recibo en mi vida…
Veinticuatro años. Un metro con ochenta y un centímetros. Dos años más de contrato que cumplir en el Betis.
– ¿Has soñado alguna vez con un equipo “supergrande”?
– Sueño poco. Vivo de realidades y estoy muy a gusto en el Betis
– ¿Esperanzado en la temporada?
– Bastante. Quedaremos bien clasificados
– ¿Por qué puesto?
Sonríe. No quiere riegos. Pero como se le llama valiente, se obliga con el trofeo
– Tercero o cuarto
– ¿Entonces el bache de París y el posterior ante el Levante?
– Hacer buenos partidos todo el año es imposible. Ten en cuenta que nuestra temporada es más recargada de lo normal, y la crisis de juego se ha hecho no al cuarto partido sino al doce o quince, puesto que el Carranza y la excursión por Europa deben contar…
Los jugadores van llegando a la secretaría. Faltan pocos minutos para la marcha. Ya está casi todo el grueso de la expedición.
– Tú juegas en punta. Has de dar la cara siempre. ¿No te cansas de una obligación dominical tan esforzada?
– A veces sí. Pero procuro volver a mi puesto
– ¿Qué pasará en Bilbao?
– El Atlético ha demostrado con lo de Belgrado que está en forma y en juego. Será un contrario muy difícil…
Montaner, Ansola y Molina, los tres hombres de punta en San Mamés. López-Hidalgo y Suárez a la defensa. Frasco de alimentador de la delantera. Lasa, director de juego.
– A propósito de este premio, ¿Has pensado alguna vez en el “Patricio Arabolaza”?
– La verdad, un poco me creo con derecho a él. Pero como hay muchos jugadores que también representan la furia española…
Serio. Más bien tímido. Aguerrido y valiente en el campo. Continuador de lo que se creara un día de 1920 con la frase de Belauste: “¡A mí Sabino, que los arrollo¡”. Se llama Fernando Ansola. Viste de verde y blanco. Los americanos residentes en Sevilla se adelantaron al Patricio Arabolaza..
Fuente: Manuel Alonso Vicedo en Sevilla 9 de octubre de 1964