Entrevista José Seguer 1957
José Seguer llegó al Betis en 1957 procedente del FC Barcelona, club en cuyo primer equipo estuvo durante 14 temporadas.
Sin embargo, su salida del club fue un tanto traumática, dado que una normativa que limitaba las plantillas a 25 jugadores le dejó fuera del club azulgrana para la temporada 1957-58.
Cuando tenía decidida su retirada del fútbol, a la edad de 33 años, una oferta del Betis, que de la mano de Antonio Barrios se estaba reforzando para conseguir el ascenso a Primera División, le decidió a seguir activo en el mundo del fútbol.
Esta entrevista, cargo del corresponsal del diario Marca en Barcelona, nos detalla estas circunstancias.
Una auténtica sorpresa ha constituido en los medios deportivos de la Ciudad Condal la noticia de la inminente marcha del que fue jugador del Barcelona José Seguer al Betis, de Sevilla, por cuanto siempre se consideró al mismo ligado íntimamente a los colores azulgranas, con los cuales, en el transcurso de diecisiete años, escaló paso a paso, y por sus propios méritos, la empinada cuesta que lleva del anonimato a la consagración definitiva en forma de titular indiscutible en el club decano barcelonés e internacional en cuatro ocasiones.
Verdad es que el paso del tiempo actúa en forma implacable para todos, y que las nuevas promociones vienen empujando con fuerza, lo cual nadie puede ignorar, como no lo ignoraba tampoco Seguer, quien, por su parte, había anunciado su firme propósito de colgar la botas definitivamente el año próximo, perteneciendo al Barcelona.
Las circunstancias han impedido a Seguer cumplir su deseo. La decisión de la Comisión técnica del club azulgrana, a la vista de la disposición que limita a veinticinco el número de jugadores que pueden figurar en las plantillas de los equipos de categoría nacional, echaron por tierra las ilusiones de Seguer, coincidiendo aquella decisión con la muy interesante oferta que le llegó de Sevilla.
Hemos visitado a José Seguer en la fábrica de bebidas carbónicas que tiene instalada en las afueras de Barcelona, donde, por otra parte, pensaba refugiarse al decir adiós definitivamente al fútbol.
Breve charla con el veterano jugador ya ex barcelonista, que finalizó en su domicilio particular, teniendo por telón de fondo las fotos, medallas y trofeos, que llevan consigo el recuerdo de los diecisiete años defendiendo los colores azulgranas.
– Verdaderamente, mi intención era despedirme de la afición catalana al final de la temporada próxima, después de dieciocho años de jugador en activo, con lo cual pensaba batir un récord hasta ahora no establecido en el seno de mi antiguo club; pero las circunstancias han querido que todo terminase en forma bien distinta—comenta en tono nostálgico, mientras pierde su vista hacia la vitrina próxima a nosotros.
– Por lo visto, te dolió esa decisión del Barcelona, ¿no es cierto?
– Muchísimo, esa es la verdad. Y creo que mi larga temporada en ese equipo, sin crear nunca ningún problema, sin exigir nunca nada tampoco, y amoldándome a todos los puestos que quisieron asignarme, creo que eran merecedores de una última atención final
– ¿Cuál fue tu reacción al conocer la noticia?
– Un deseo incontenible de lanzar las botas lo más lejos posible, y no querer saber nunca nada más del fútbol
– Sin embargo, el mes próximo volverás de nuevo a calzar esas mismas botas en Sevilla, ¿no es cierto?
– Afortunadamente para mí, cuando mayor era mi desmoralización, me llegó esa oferta, muy interesante del Betis. Un breve viaje a Madrid, donde me entrevisté con Barrios, y en menos de una hora había suscrito un contrato con el club sevillano por plazo de dos años a instancias de ellos, porque mi intención era jugar una sola temporada más
– ¿Crees sinceramente que podrás rendir lo que de ti se espera en el Betis?
– Puedo asegurarte que si no lo creyera así no habría firmado. Sin jactancia, puedo asegurarte que tengo mi porvenir completamente resuelto al margen del fútbol, no por lo que el mismo me haya reportado, sino por mi espíritu ahorrativo y emprendedor en los negocios, motivo por el cual no necesitaba de este nuevo fichaje como recurso. Si voy al Betis es porque estoy seguro de rendir al club un servicio, sin necesidad de ampararme en mi nombre deportivo ni en el recuerdo de un pasado. Aparte, de que si las fuerzas llegaran a faltarme antes de cumplirse el plazo, dejo siempre en libertad a los caballerosos directivos del Betis para rescindir mi compromiso.
Poco más nos dijo ya José Seguer, al que veremos la temporada próxima enfundado en la camisola blanquiverde del histórico club de Sevilla, cuando aquí, en Barcelona, se consideraba a Seguer íntimamente ligado a otros colores de acusado matiz azulgrana.
Fuente: Subiran em Marca 27 de julio de 1957