Entrevista Julio Cardeñosa en el Valladolid 1972
Julio Cardeñosa en 1972 cumplía su tercera temporada en el Real Valladolid, al que llegó procedente del filial Europa Delicias en la temporada 1970-71 en Tercera División. Con 23 años en 1972 era una de las firmes promesas del equipo vallisoletano en su intento de alcanzar la Primera División. En esta temporada el conjunto vallisoletano, entrenado por José María Martín, alcanzó una quinta posición en la tabla.
Julio Cardeñosa se convirtió en el cerebro del equipo, jugando en el centro del campo, después de haberse iniciado pegado a la banda izquierda. En el verano de 1974 José María de la Concha lo fichó para el Real Betis Balompié, donde permanecería hasta 1985.
En esta entrevista aparecida en diciembre de 1972 en AS repasa sus inicios en el mundo del fútbol y su carrera en el Real Valladolid.
La Escuela Infantil de Fútbol ha dado muy buenos frutos. De ella han salido jugadores que, más tarde, lograron la consagración en equipos de primera fila. Uno de ellos, Cardeñosa, interior del Real Valladolid, en quien la afición local tiene depositadas sus mejores esperanzas.
Julio Cardeñosa Rodríguez nació en esta ciudad, en el popular barrio de la Rubial, un 27 de octubre de 1949. Sus comienzos futbolísticos tienen por escenario el campo de la Escuela de Fútbol Infantil del Frente de Juventudes, pasando después al San Fernando juvenil, en donde empieza a destacar rápidamente por su depurada técnica. Juega un par de meses en la Gimnástica Arandina y de ahí al Real Valladolid, tras su estancia en el filial Europa Delicias. Desde la temporada 1970-71 milita en el Real Valladolid como titular. Realmente no ha sido fácil para Cardeñosa llegar hasta donde ha llegado.
– ¿Has sido profeta en tu tierra?
– Me ha costado mucho trabajo llegar hasta donde he llegado. Claro que hasta esta temporada no he jugado lo que yo deseaba, ni en el sitio que me gustaba hacerlo.
– ¿Contento ahora?
– El míster me ha dado una gran confianza desde el principio de temporada, yo he cogido experiencia y creo que voy cumpliendo.
– ¿No será también que tú jugabas en una demarcación poco ajustada a tus cualidades?
– Es posible y creo que también ha influido. Mi estilo de juego no es para estar confinado en la banda. Yo necesito más campo para moverme.
Cardeñosa tiene una de sus grandes virtudes en la potencia que imprime al disparo y el magnífico toque de balón de que hace gala, hasta el extremo de que donde pone el ojo, pone el esférico.
– ¿De dónde te viene esa facilidad?
– Yo creo que no hace falta fuerza, sino meter el pie adecuadamente, saber darle al balón. Yo he roto muchos zapatos y muchas botas hasta conseguir desplazar la pelota como lo hago ahora.
El fino jugador vallisoletano es titular de una peña en esta ciudad. Como las cosas le van saliendo bien al titular le pregunto por ella y Julio me responde:
– Sigue funcionando con toda normalidad. Este año, cuando me van saliendo bien las cosas, reina en ella una gran alegría. El año pasado no tenía ese ambiente, pero hay que tener en cuenta que entre el servicio militar y otras circunstancias, apenas si tuve oportunidades de jugar.
No es difícil ver a los componentes de la Peña Cardeñosa ataviados con sus clásicas boinas amarillas coreando el nombre del Valladolid, tanto en Zorrilla como en los campos en los que juega el titular de la ciudad del Pisuerga.
Todos los futbolistas tienen su mote. A éste, los compañeros nunca le llaman por su nombre ó apellido. A Cardeñosa le llaman “Cani”.
– ¿Por qué te llaman Cani?
– Por lo delgado que soy. Llácer, que además de compañero es un gran amigo, me llamó un día en broma canijo. Después, fueron sintetizando el apelativo y me he quedado con Cani. Ahora el míster me llama “Flaco”. Cuando llegó en agosto no le salía el nombre y optó por llamarme Flaco.
Hay quien dice que Julio Cardeñosa tiene una pierna izquierda que es como una mano. La hago notar esta característica y me contesta así:
– Yo creo que todos los jugadores manejamos mejor una pierna que otra. Yo soy zurdo y es lógico que tenga más habilidad con la izquierda. Pero no hay que olvidar que jugando en el Europa Delicias marqué 17 goles y 10 fueron con la derecha.
Cambiamos de tema. Hablamos de la Segunda División, de cómo va el torneo, de las posibilidades de unos y otros.
– No creo que haya favoritos en el momento actual. La igualdad es manifiesta y pienso que va a subsistir hasta casi el final del torneo. Al Santander, por ejemplo, no le vi nada de particular; me ha gustado por el oficio que tienen sus hombres el Sevilla y el Elche.
– ¿Y el Valladolid quedó descartado?
– Ni mucho menos. Nosotros vamos a hacer lo que podamos. No nos daremos por vencidos así como así. Al final, ya veremos quién se lleva el gato al agua.
– ¿Cuántos goles llevas esta temporada?
– Uno, frente al Córdoba. Precisamente lo marqué con la pierna derecha. De todas formas, en el sitio que juego ahora es más difícil hacer diana, aunque, eso sí, mi facilidad para el disparo me permite tirar desde fuera del área con bastantes posibilidades de éxito. Ojalá que tenga suerte en esos tiros…
Julio Cardeñosa, cara de héroe infantil de película, se ha erigido en una de las figuras más prometedoras del once vallisoletano.
– ¿Por qué eres futbolista?
– Porque me gusta mucho. Dios quiera que esta afición que tengo me permita ofrecérsela al Real Valladolid para lograr el ascenso. Sería una de las mayores alegrías de mi vida.
Fuente: Jaime del Condado en AS 14 de diciembre de 1972