Entrevista Luis Del Sol 1963.
Luis Del Sol marchó al fútbol italiano en el verano de 1962. Era una época en donde los futbolistas españoles que jugaban en clubs importantes del extranjero se podían contar con los dedos de la mano. En esa temporada 1962-63 fueron 4 los jugadores españoles que jugaban en el Calcio: Luis Suárez, que cumplió su segunda temporada en el Inter, Joaquín Peiró, que disputó su primera campaña en el Torino, Juan Santisteban, que jugó su segunda temporada en el Venezia, aunque cedido por el Real Madrid, y el propio Luis Del Sol, que era su primera campaña en la Juventus.
Cuando Luis Del Sol durante sus 10 años volvía a España durante los periodos vacacionales era muy frecuente que fuera el objetivo de la prensa deportiva. El exotismo de jugar en una liga extranjera y en un club de alto nivel, en unos años en que España permanecía en muchos aspectos al margen de la actualidad internacional, le hacían foco de atención de los medios de comunicación. Y más en esta primera estancia en España, sólo 4 días, tras su marcha a Italia. De ahí que se produzca esta entrevista para el semanario deportivo Marca, publicada el 11 de junio de 1963 y a cargo del periodista sevillano Juan Tribuna, dado que la entrevista se realiza en Sevilla, aunque al ser enfocada para un medio con origen en Madrid, la línea de la entrevista se centra en la experiencia de Luis Del Sol en su primer año en el fútbol italiano y su reciente relación con el Real Madrid. Pues hay que destacar que cuando fue traspasado a la Juventus el Real Madrid se reservó una primera opción para su reingreso en el caso de que dejase el fútbol italiano en algún momento. Un dato que reaparecería casi 10 años después, en 1972, cuando Luis Del Sol dejó Italia con 37 años y volvió a Sevilla para fichar por el Betis, pero que antes tuvo que resolver con el club madridista, aunque hay que señalar que no se le puso ningún problema para volver a Heliópolis.
Siempre he creído que Luis Del Sol es un jugador sevillanísimo. De los pies a la cabeza y de la cabeza a los pies. Tan sevillano, tan sevillano, que ahora, en el pináculo de su gloria deportiva, su mayor renuncia y su más incuestionable “sacrificio” es vivir tan lejos de Sevilla y no poder recuperarse con un poquito de “jaleo”—pero jaleo del bueno—que es su mayor añoranza allá por la Italia norteña, que para él, gracias a Dios, se ha convertido en su “paraíso” futbolístico…
Cómo ha llovido desde aquel 6 de abril de 1935 en que Luis Del Sol hacía el octavo hijo de Bonifacio y Abelarda. Y conste que lo de jugador sevillanísimo no lo hemos puesto a humo de paja, sino para recalcar que el soriano, porque Del Sol nació en Arcos de Jalón, provincia de Soria, al ser traído a Sevilla con sólo dos meses de edad, se considera un sevillano más. Porque lo primero que él vio, cuando le dejaron ver algo, fue el perfil inconfundible de la Giralda, la torre más airosa del mundo.
Del Sol hubiera venido a España con la Juventus. Como el partido ha sido aplazado a septiembre, ahora tendrá ocasión de darse otro “garbeíto” cunado vuelva con la Juve. Con Luis han venido su mujer y su hija. El matrimonio espera nueva descendencia y el futuro retoño será, si Dios quiere, sevillano y… ¡qué bien si fuera Luis¡
Hacía ya cerca de cinco años que no hablaba tranquilamente con Luis Del Sol. La última vez que hablamos él estaba en el Betis y el equipo caminaba rumbo a su puesto en la Primera División. Ya era un ídolo del deporte. Pero ni antes de serlo, ni después, ni ahora Del Sol ha variado en nada. Continúa siendo tan sencillo y tan cordial como siempre.
El primer equipo en que jugó Del Sol fue el Alegría, quizás como anticipo de su juego y su carácter. Tras el Alegría, el San Jerónimo, la barriada donde vivía en unión de sus familiares. ¡Quién no se acuerda del “Gordito del Empalme”, que por aquellas fechas tan tempranas ya hacía encajes de bolillo con la pelota en los pies¡. Luego el equipo de la I.S.A. y más tarde el Andalucía y el juvenil del Betis. Y pensar que si nos es por Pepe Valera no hubiera jugado en “er Beti”… Y completan la hoja de servicios el Utrera como once intermedio y ya definitivamente el Real Betis Balompié, el Real Madrid y la Juventus.
Luis del Sol ha estado tres días en Sevilla y uno en Madrid y se ha llenado de España los pulmones para que ahora, al regresar a la Juve, su fuelle inagotable continúe sentando por los céspedes italianos la capitanía general de su juego con mando en plaza.
Cuando felicito a Del Sol por sus triunfos en Italia la Giralda y la Torre del Oro testifican con su presencia el lugar donde se hizo el reportaje. En Sevilla y junto al Guadalquivir hemos charlado largo y tendido con el interior de los pulmones de acero.
- Luis, se han dicho muchas cosas sobre la posibilidad de que no siguieras en la Juventus- ¿Qué hay de cierto ante tanto rumor?
- Que estoy ligado a la Juventus por tres temporadas; la actual y dos temporadas más. Que sería preciso que mi club quisiera dejarme ir y que yo quisiera irme, per o ambas cosas no es probable que se produzcan.
- ¿Tan a gusto estás en Italia?
- Pues sí, estoy a gusto y contento en la Juventus. La prensa ha hablado muy bien de mí, se me estima y yo trato de corresponder a las atenciones que recibo
- Entonces, ¿de regresar a España?
- Por ahora no. Ya te digo que tengo contrato por dos años más. Y allá en Italia se gana el dinero como en ninguna parte. ¡No te puedes hacer una idea¡
Luis Del Sol mueve sus manos con un gesto peculiarísimo, que es indudable que ha adquirido en Italia. Así se lo hace notar mi compañero Luis Arenas. Y del Sol asiente…
- Los italianos son muy expresivos, especialmente los niños, y sui ustedes vieran cómo mueven sus manitas y gesticulan expresivamente con ellas
Vuelvo a insistirle.
- Por ahora, italiano, con los que te entenderás en su idioma, un idioma muy dulce…
- Por encima de todo hay que aprovechar estos años, que después ya no se vuelven a vivir. El italiano lo hablo, pero sin haber estudiado. Me he servido mucho de las revistillas humorísticas, de los tebeos…
- Pero, en fin, cuando termines en Italia, ¿regresarás a España?
- Hombre, todo depende de que yo les pueda seguir interesando allá…
- De acuerdo. Pero a la hora del regreso, ¿el Madrid y tú tenéis algún compromiso?
- Sí. Yo tengo el compromiso de regresar al Madrid. Pero es que aunque no lo tuviera, yo regresaría al Madrid. Lo que es el Madrid no lo sabemos más que los que hemos tenido la suerte de estar en el Madrid. Cuando vengo a España y voy por el club sé que regreso a mi casa. Pero aún ahora que soy jugador de la Juventus. Cualquier indicación que pueda hacer, que te digo… relacionada con el pasaporte, con mi piso de Madrid…, lo que sea, inmediatamente te lo solucionan todo. El señorío del Madrid es algo indiscutible…
- Pues, por lo que me dices, Madrid te tira a ti más de la cuenta…
- ¿Y a quién no le tira Madrid, Juan?
- Pues tienes razón
- Por algo es la capital de España
- ¿Y Helenio Herrera?
- Por allí anda…
- ¿Qué tal su papel en el fútbol italiano?
Luis Del Sol se queda un momento pensativo. Luego hace intención de responder a mi pregunta, pero antes de pronunciar una sola palabra parece como si hubiera cambiado rápidamente de intención y se limita a contestarnos, mientras mueve expresivamente la cabeza:
- Mira… Helenio Herrera entrena al Inter y yo juego en la Juventus. Él es entrenador y yo jugador. Él vive su vida, y yo la mía…
- ¿Nada más?
- ¿Te parece poco?
Comprendo que Luis Del Sol no quiere hablar de H.H.
- ¿Te ves con Luis Suárez?
- Algunas veces. Somos buenos amigos.
- ¿Y Peiró?
- No ha tenido suerte… Con lo buen jugador que es…
- ¿Es muy difícil jugar en Italia?
- Yo creo que sí. Porque allí no destacamos unos sobre otros. Existen varios primera serie. E incluso los equipos inferiores te dan el disgusto igual que cualquier grande. Ya has visto al Inter, en los últimos partidos no ha hecho más que perder puntos
- ¿La dificultad del fútbol italiano la plantean sus acentuadas tácticas defensivas?
- Para burlar tan cerrados sistemas de marcaje figúrate la de vueltas que hay que dar. Lo que no se puede es entrar por derecho, de un tirón, porque entonces se estrella uno contra la barrera defensiva…
- ¿Por qué se hacen tan cortos resultados con los equipos inferiores?
- Porque éstos se cierran aún más todavía. Plantan, si acaso, a un delantero delante y los demás a defenderse. ¡Cualquiera entra allí¡
- ¿Regresas sólo a Italia?
- Allí está mi suegra y la muchacha de servicio que me llevé de España
- ¿Qué tal ambiente rodea al fútbol?
- Parecido al de aquí. En esto del fútbol no hay grandes diferencias
- Ya me has dicho que por allá te tratan bien, te estiman… ¿Ocurre igual con los demás compañeros, con los españoles que allí jugáis?
- Sí. Si todos no rendimos lo mismo, cuando aparece la personalidad de cada uno, aunque sean pequeños detalles, el público por esos pequeños detalles ya justifica a “su” jugador…
- ¿Y Santisteban?
- Está jugando francamente bien. Pero Santisteban regresará a España al final de la temporada.
- Y tú, Luis, ¿Cuándo regresarás?
- Cuando Dios quiera…