Entrevista Pepe Mel 1989.
Pepe Mel llego al Betis en septiembre de 1989 procedente del CD Castellón, equipo con el que había ascendido a Primera División la temporada anterior, consiguiendo 21 goles con el equipo blanquinegro.
Su fichaje por el Betis, recién descendido a la Segunda División tras la infausta promoción con el Tenerife, podía parecer una apuesta un tanto extraña. En esta entrevista con el periodista Juan Luis de Las Peñas publicada en Diario 16 Andalucía en octubre de 1989 el delantero bético explica los motivos que le llevaron a esta decisión.
Pepe Mel fue el máximo goleador de la categoría con el Betis esa temporada con 22 goles, que fueron decisivos para el retorno a la Primera División.
El suyo fue un fichaje por entregas, con sucesivos tiras y aflojas que culminaron, a punto de iniciarse la Liga, con su llegada al Villamarín. Desde entonces, José Mel se ha convertido en uno de los pilares en los que se asienta este Betis que, tras unos comienzos titubeantes, camina hacia la Primera División. Ocho goles, la mayoría cerca del final de los partidos, cuando para el rival apenas hay solución, le han dado al equipo seis positivos y una eliminatoria de Copa. También ha contribuido a encarrilar el choque copero con su ex equipo, un Castellón que, en bloque, no ha igualado su cifra de goles béticos.
Nadie puede poner en duda la efectividad de Mel en el mes y medio que lleva en el equipo verdiblanco. Cinco goles suyos, todos lejos del Villamarín, le han reportado al Betis seis de los once puntos que lleva en el campeonato liguero. Dos tantos con su firma, por otra parte, le dieron al equipo el pase ante el Mallorca en la Copa del Rey y un tercer gol copero, en esta ocasión ante sus ex compañeros del Castellón, hace que el Betis acuda con una clara ventaja al encuentro del Nuevo Castalia en el que se dilucidará la clasificación para la siguiente eliminatoria.
– Es usted el hombre de los goles decisivos…
– No es eso exactamente, porque aunque es cierto que he hecho bastantes goles no lo es menos que han sido producto del trabajo de todo el equipo. Yo soy el goleador, pero detrás hay un trabajo conjunto que hay que valorar en su medida. Cuando Mel marca un gol lo hace el Betis. Lo único que yo hago es tocar el último el balón y por eso me llevo los laureles
– Pero es que además todos sus goles en la Liga han sido fuera de casa, lo que no es normal es un hombre de área
– Lo que ocurre es que en nuestro campo tenemos más dificultades, y la prueba es que, salvo el día del Palamós, siempre hemos tenido dificultades para ganar. En el Villamarín, los equipos se cierran atrás, mientras que cuando jugamos fuera todos quisieran ganarnos y es normal que los delanteros dispongamos de más espacios
– Sin embargo se le acusa de inhibirse durante buena parte de los partidos, de que sólo se nota que está en el campo cuando hace un gol. ¿Qué tiene que decir?
– En el campo cada uno tiene una misión, y es el técnico, en este caso Corbacho, el que nos la marca. Me gustaría colaborar en otras funciones, pero mi cometido es intentar aprovechar el máximo de balones que lleguen arriba. De nada serviría que me matase defendiendo si luego no hay nadie para buscar el gol. Igual que a Pumpido, por ejemplo, se le exige que pare los balones, a mi me piden que haga goles, y en eso estoy
– Mel esta de moda. Recibe continuos elogios y se le atribuye buena parte del éxito del equipo. ¿Le causa esto algún problema con un compañero?
– Todo lo contrario, tengo que decir que me he encontrado con un grupo humano fenomenal. Confieso que cuando fiché por el Betis estaba un tanto inquieto por la fama que tenía el vestuario, ya que en temporadas anteriores se había hablado de que existían problemas, pero una vez aquí he comprobado que el ambiente es excelente. Es bonito, por ejemplo, que Caldere me diga que yo siga metiendo goles, que él ya se encargará de correr, que Pumpido esté animando constantemente, que todos, cada uno desde su puesto, busquemos lo mismo
– ¿Y el técnico? ¿Cómo definiría a Corbacho?
– Es sencillo. Corbacho es la ilusión por triunfar. Nadie en el equipo tiene más ganas que él de que el Betis logre su objetivo
Formado en la cantera madridista, José Mel ha pasado por diversos equipos y por todas las categorías. Castilla cuatro años, Alcalá una temporada, medio año en Osasuna, temporada y media en el Castellón. Su etapa en el equipo navarro fue la única que ha vivido en Primera, aunque una lesión le dejó prácticamente inédito:
– No sé si lo que me pasó le ha ocurrido a alguien más en la historia del fútbol. Me lesioné el mismo día de la presentación, el día de las fotos y el uniforme oficial, y estuve cuatro meses sin poder jugar. Luego fui algunas veces convocado, pero ya no pude entrar en el equipo y decidí irme al Castellón a mediados de temporada
Máximo goleador en Segunda B con el equipo complutense y en Segunda A el año pasado con el Castellón, muchos no se explican el porqué de su fichaje por un equipo en estos momentos en Segunda, el Betis, cuando tenía la oportunidad de jugar en la máxima categoría con el equipo de La Plana.
– Pocos jugadores hacen como usted. ¿Por qué dio ese paso?
– Ha sido como el que invierte en Bolsa, que no espera un interés inmediato sino beneficios a medio o largo plazo. Para mí el Betis es un club de Primera, histórico, que circunstancialmente está en Segunda, mientras que estoy convencido de que, desgraciadamente, el Castellón va a ser uno de los equipos que desciendan este año, con lo que las circunstancias cambiarán la próxima campaña. Creo que he hecho lo correcto
– También es mas fácil destacar en un equipo puntero de Segunda que en uno de los que parten en Primera con el único objetivo de mantener la categoría…
– Eso es evidente. En la posición que ocupo puedo asegurar que si se crean diez ocasiones voy a hacer dos goles, mientras que si las oportunidades son pocas, como ocurre en el Castellón, la opción es mucho menor. En este sentido, sé que lo estaría pasando mal en el Castellón
– Eso podría traducirse en miedo a la Primera División…
– No hay miedo. Es más, estoy convencido de que si estuviéramos en Primera triunfaría e incluso podría ir al Mundial de Italia. Por qué no, si está visto que lo que valen son los goles
– Además de su especie quedan pocos
– Desde luego. La mayoría de los goleadores de Primera División son extranjeros. Quizá Julio Salinas sea el único español. Por tanto, creo que yo podría estar entre los mejores