Entrevista Roberto Ríos 1993

Roberto Ríos llegó a la cantera verdiblanca en 1988, el año en que su padre, Eusebio Ríos, ejerció como entrenador de la primera plantilla verdiblanca.
Antes, aunque nacido en Bilbao en 1971, había vivido en diversas ciudades, siempre siguiendo la trayectoria profesional de su padre como entrenador (La Coruña, Murcia, Valladolid, etc). Tras pasar por el equipo juvenil con una trayectoria más que brillante, en marzo de 1991 debutó con el Betis B contra el Badajoz de la mano de José Emilio Del Pino. En la 91-92 participó activamente en el Betis B entrenado por José Ramón Esnaola y le llegó la oportunidad de debutar en partido amistoso con el primer equipo, el 28 de diciembre de 1991 en El Palmar frente al Atlético Sanluqueño.
Participó en la pretemporada bética en el verano de 1992, jugando todos los encuentros (11) que el equipo disputó. Por la reglamentación federativa no fue convocado para el debut liguero con el primer equipo (6 de septiembre contra el Compostela en el Villamarín) y sí para el debut del filial en Los Cármenes contra el Granada.
Pero para Jorge D´Alessandro estaba claro que Roberto Ríos tenía sitio en el primer equipo, con lo que en la jornada siguiente (13 de septiembre de 1992) hizo su debut oficial con el Real Betis Balompié en Las Llanas frente al Sestao, muy cerquita de Portugalete y de Bilbao, la tierra de su padre y donde él mismo nació.
A partir de ahí Roberto Ríos se convirtió en pieza fundamental del equipo bético esa temporada y las 4 restantes que jugó en el equipo verdiblanco.
Esta entrevista, a cargo del periodista Juan Luis De las Peñas, se publicó en Diario 16 Andalucía el 3 de enero de 1993, y en ella Roberto Ríos repasaba su trayectoria deportiva hasta llegar al primer equipo bético.
Convertido por culpa de la profesión de su padre en un verdadero trotamundos—Murcia, Valladolid, La Coruña, Sevilla—Roberto Ríos parece decidido a asentarse en la tierra y en el club en que su padre, Eusebio, vivió sus años más gozosos. Un Eusebio Ríos de cuya mano llegó, hace de esto cinco años, a la cantera verdiblanca y cuyos logros en el Benito Villamarín está dispuesto, al menos, a reeditar. Por el momento, no ha hecho más que empezar. No llega a la veintena de partidos oficiales con la camiseta verdiblanca y reconoce que no ha hecho “nada” en el fútbol, pero sabe también que cuenta con la confianza de su entrenador, Jorge D´Alessandro, que le ha encontrado un hueco en el equipo.
- Roberto Ríos en el Betis, Un futbolista típico del norte en uno de los más claros exponentes del fútbol del sur…
- Sí, pero que yo haya nacido en Bilbao no quiere decir nada, porque futbolísticamente me he crido prácticamente en Sevilla. Llevo cinco años jugando en el Betis, después de llegar al equipo juvenil de Liga Nacional que llevaba Esnaola; o sea, que más del norte soy de aquí
- De todas formas, siendo vasco ¿no hubiera preferido el Athletic, o al menos intentarlo?
- La verdad es que mi vida ha transcurrido muy poco por allí. Siempre he estado a caballo con mi padre, donde iba él tenía que ir yo, hasta que aquí he encontrado un sitio estupendo. Además ser de allí es como una anécdota, porque he estado viviendo en Murcia, en Valladolid, en La Coruña y en un montón de sitios
- En Sevilla las cosas parecen irle muy bien. ¿Pensó que sería así cuando llegó un poco de puntillas, junto a otros jugadores del filial en la pretemporada?
- Desde luego no pensaba que se me podía dar tan bien, pero la verdad es que tampoco he hecho nada hasta el momento. Estoy jugando, sí, pero en esto del fútbol me quedan un montón de cosas por hacer. Ahí me tengo que fijar en un hombre como Gordillo, ése sí que es una institución en el Betis
- Es cierto que acaba de empezar, pero ya ha dejado en el banquillo a hombres que, en principio, parecían contar con más posibilidades
- Se me está dando bien, a pesar de que mi juego no se suele ver mucho desde la grada, ya que el mío es un trabajo sucio, de recuperar balones y darlos a otros compañeros para que organicen el juego. Eso es lo que el entrenador ha visto, y desde el principio, en la concentración de Cazalla, me ha estado apoyando
- Ha hablado de Gordillo. En su puesto de pivote suele tenerlo a él a un lado y a Gabino a otro. ¿Hubiera imaginado hace algunos meses que iba a estar entre futbolistas de tanta categoría?
- Ahora lo estoy asimilando, porque el trato con ellos es diario, pero el año pasado no podía ni imaginarme que iba a tener un hueco en un centro del campo como el que tiene ahora el Betis, lleno de internacionales. Gran parte de culpa de eso la tiene el entrenador, que es el que me está dando confianza
- Una confianza, supongo, muy importante para usted…
- Prácticamente lo más importante. Si sabes que el entrenador no confía en ti, tu rendimiento no es el mismo, pero D´Alessandro me dio esa confianza. Así ocurrió el día del Barcelona en el trofeo, cuando yo estaba muy nervioso y en el túnel de vestuarios me dijo que no pasaba nada, que tenía que salir para divertirme y no para otra cosa
- Pero tras hacerlo titular ante el Barcelona, no lo convoca para el debut liguero, aludiendo a que si empezaba con el primer equipo ya no podía regresar al filial. ¿Pensó en ese momento que tendría que seguir esperando?
- Era algo que yo sabía, porque me lo habían comentado, y, por lo demás, yo estoy en el Betis para jugar donde me manden. Si hubiera tenido que seguir jugando en el filial no hubiera pasado nada
- Parece que de ningún modo se lo está creyendo…
- No, porque esto da muchas vueltas, y lo mismo que ahora juego, mañana puedo dejar de contar. En el Betis estamos todos a un buen nivel, y en cualquier momento puedes perder el puesto
- Ha jugado casi todos los partidos, pero es ahora cuando está destacando. Supongo que porque el equipo marcha bien…
- Con los resultados a favor hay mucha más alegría; cuando la cosa está como al principio de la Liga, al equipo le cuesta más trabajo jugar. Además, en el Betis hay una gran presión por el tema del ascenso, y a los jóvenes se nos nota más
- Con ese corte de pelo a lo marine parece bastante mayor, ¿es una simple cuestión de modas o es que así impone más respeto?
- Ni una cosa ni otra. Lo que pasa es que estoy francamente mal de pelo y me dijeron que cortándomelo mucho lo iría manteniendo. En cuanto a la edad, es cierto que parezco bastante mayor de los 21 años que tengo
- Y con 21 años, ¿nunca pensó en que podía haber estado en los Juegos Olímpicos?
- Al Mundial sub 20 de Portugal sí tuve la oportunidad de ir, porque jugué completos los dos partidos de preparación previos al campeonato y estuve en la lista de veinticinco que dio Pereda. Eso sí fue una decepción, pero lo de la Olimpiada estaba claro
- Su padre, Eusebio Ríos. ¿Espera que llegue el día en que en lugar de referirse a usted como el hijo de Eusebio Ríos hablen de él como el padre de Roberto?
- No sé. Parece que él tuvo unos años muy acertados en el Betis y que le gente le quiere mucho, así que ojalá pueda repetir lo que hizo él, estar diez años y lograr que la afición me quiera
- Por último, ¿Roberto o Ríos?
- Cuando llegué al Betis me preguntaron y siempre lo he preferido así