Hoy hace 20 años. Despedida de Víctor Fernández.

El 8 de junio de 2004 Víctor Fernández dirigió al Betis en Chapín en un amistoso con victoria 0-1 y que fue el último encuentro de la temporada.
Ese mismo día se despidió del Real Betis Balompié y de su afición en una carta pública a través del club, en la que recordaba que llegó «al Real Betis hace ahora dos años cargado de ilusiones y con el objetivo de colaborar, en la medida de mis posibilidades, al engrandecimiento de una entidad casi centenaria sin la cual no podría entenderse en plenitud la historia del fútbol español«.
El técnico, que no había logrado clasificar al equipo en las dos campañas para competiciones europeas, reconocía que «el trabajo de estos dos años no ha ofrecido los resultados con los que todos soñábamos. Os pido perdón por ello porque mi responsabilidad ha sido máxima, pero quiero que sepáis que he puesto en la empresa toda mi capacidad, mi experiencia y mi esfuerzo para competir siempre con la máxima dignidad a favor del escudo y el nombre del Real Betis».
El entrenador maño resaltaba las virtudes del club al que ha pertenecido y afirmaba que «los béticos podéis sentiros orgullosos de haber creado, desde vuestra forma de sentir las cosas, una entidad que se distingue claramente de las otras por la fuerza de vuestras convicciones pasionales».
Víctor concluía la carta abierta con la posibilidad de que «quizá algún día el destino vuelva a juntar nuestras fuerzas a favor de la causa común del Betis. Y quizá entonces podamos celebrar las cosas que en esta ocasión se nos quedaron por el camino».
Seis años después, en 2010, los caminos del Betis y Víctor Fernández se volverían a cruzar, cuando suplió a Antonio Tapia al frente de la plantilla para intentar el ascenso a la Primera División.