La gran familia catalana del Real Betis Balompié. 1959.

Con este título se publica en el diario catalán Mundo Deportivo una entrevista el 7 de septiembre de 1959 a cinco jugadores béticos: Jorge Vila, Andrés Bosch, Ramón Oliet, Quico Grau y Juan Sitges.
Estos 5 jugadores catalanes militaban en la temporada 1959-60 en el club verdiblanco, lo que explica ese interés del diario deportivo barcelonés por acercar a sus lectores esa importante presencia catalana en la plantilla verdiblanca, lo que ha sido una constante durante la historia del club bético, pues un mínimo de 54 futbolistas de origen catalán tenemos registrados a lo largo del tiempo, lo que la ubica como la tercera comunidad autónoma con más presencia a lo largo de la historia.
En la temporada actual sigue habiendo una importante presencia con 5 futbolistas (Alex Moreno, Montoya, Víctor Ruiz, Ruibal y Édgar) y en la pasada se sumaban aún dos más (Bartra y Tello).
Volviendo a la entrevista de hoy en Manquepierda en ella aparecen dos futbolistas ya más que consagrados en ese momento, con un pasado importante como Andrés Bosch y Jorge Vila, y 3 jugadores que comenzaban a destacar en el panorama futbolístico, como Grau, Oliet y Sitges. Todo ello está muy presente en la entrevista, donde se aprecia claramente cómo los dos primeros son ya futbolistas más que consagrados, y los otros 3 tienen aún muchos años de fútbol por delante.
La gran familia catalana del Real Betis Balompié la integran cinco jugadores. A saber, Vila, Oliet, Bosch, Sitges y Grau, por orden de antigüedad en el club de fútbol sevillano. Y los cinco, cada cual en veteranía y permanencia en el once blanquiverde andaluz, elementos principales del mismo. Titulares efectivos no existen—ni existieron, con Antonio Barrios—en el conjunto de referencia.
Creímos interesante someter a los cinco a una breve entrevista, pero sostenida en conjunto, “en línea” frente al periodista. Suponíamos que al lector catalán y esencialmente a aquellos que fueron, o continúan siendo admiradores y amigos de los aludidos, les gustaría saber de las andanzas de éstos por tierras andaluzas, y su forma de pensar y opinar lejos de la tierra natal y de los clubs en que se forjaron o pertenecieron.
A cita acudieron los cinco muchachos, comandados por Vila, al que secundaba, como lugarteniente, Bosch (lo que suponíamos). Es una actitud, o situación de orientación, dentro de la camaradería que les une a los cinco, que se aprecia a simple vista. Tanto, que no pudimos por menos que hacérselo ver a los interesados. Fue Oliet, el tercero de a bordo, quien responde:
- ¡Es muy natural¡ Vila y Bosch son dos grandes figuras del fútbol; hombres con cartel y experiencia, y nosotros, los que empezamos, nos acogemos a ellos
Sitges, por su parte, corroboró:
- ¡Y además que son, entre nosotros cinco, los que tienen coche y piso propios¡ Lo que también da para ejercer “jefatura”…
Como apreciará el lector, el buen sentido, la ponderación y el más sano humor compendian la predisposición de ánimos de la familia catalana bética. Por cierto, que a todos les anima una misma finalidad: triunfar en el Betis, en provecho del club y del propio, y…asociarse para abrir un negocio de mucho ambiente por estas tierras del Sur: un bar típico.
- Pero que conste—aclara Vila—que en ese negocio vamos únicamente a la parte positiva: al negocio. A ganar dinero, lo demás no nos compite. Pretendemos distraer unos ahorros para emplearlos en el mismo, y ejerceremos un control económico directo, en gastos y ganancias, pero…¡nada más¡ La parte activa la llevará un plantel de empleados de nuestra absoluta confianza, y por lo tanto en el local no tendremos que poner los pies…¡No vayan a creer lo que no va a ser¡ ¡Hay que aclarar¡ Además, que de otra forma, aquello no sería negocio. El día de mañana, cuando marchemos de Sevilla, entonces será llegado el momento de sumar, repartir dividendos y…¡a otra cosa¡
- O también—interviene Bosch—llevarnos íntegro el negocio a Barcelona, donde orientado y realizado al igual que aquí, con la ambientación real de por aquí, constituiría un beneficio de fábula, porque en Barcelona no los hay.
Una vez salvado el prólogo de la entrevista, acometimos derechamente el diálogo, encauzándolo hacia los temas deportivos. Y lo iniciamos abordando, en primer término, al capitán del grupo catalán blanquiverde: Vila. Queríamos saber de sus labios lo cierto de cuanto se rumoreó.
- ¿Era verdad que no ibas a renovar tu compromiso con el Betis?
- Desde que finalizó la temporada anterior, el presidente del club, señor Villamarín, solicitó que estudiara una oferta que me interesó grandemente, pues se trataba de ampliar el contrato por un año, a cambio de una importante cantidad. No lo pensé y aquí estoy una vez más al servicio del Betis
- Al finalizar, ¿volverás a suscribir otro?
- Si me requieren, ¿por qué no? Tengo todavía cuerda para tres o cuatro años, y sabe usted que soy honrado profesionalmente, que no trato de engañar a nadie y que en fin, gracias a Dios, no necesito del fútbol para vivir bien y sostener a los míos en un plano decoroso. Además, en España no hay muchos delanteros centro y mis servicios son bastante apreciados. Que si no sigo en el Betis ya tendré cabida en otro club
- ¿Catalán?
- Pues…no. Procuraré que sea por estas zonas meridionales. Ya estoy adaptado y me desenvuelvo formidablemente. Tengo residencia fija en Sevilla, mi mujer y mis hijos se encuentran muy ricamente por estas latitudes y, en fin, que no me marcharía hacia arriba para enrolarme en otro equipo
- Acabas de manifestar que en España no abundan los centros delanteros. Para tu gusto, ¿cuáles son los mejores?
Sin titubear responde nuestro interlocutor:
- Di Stéfano y Evaristo. El resto, un resto pequeño, somos iguales
- ¿En qué sentido?
- En el de buenos; pues los dos indicados los catalogo de excepcionales…
- ¿Cuántos encuentros has jugado en el Betis durante la anterior temporada?
- Veinticinco, entre oficiales y amistosos. En ellos he marcado 18 o 20 goles, no lo recuerdo concretamente
Después la emprendimos con Bosch, el segundo de a bordo, pero tercero en el orden cronológico bético. Bosch ha sido hasta hace muy poco jugador incomprendido por la hinchada blanquiverde y por el público sevillano. Hoy, es considerado como elemento insustituible. En escasos partidos, Bosch se ha situado en el plano preponderante que se esperaba, a tenor de la nombradía que nimbaba al ex barcelonista. ¿Qué había sucedido, pues, con Bosch en Sevilla? Se lo preguntamos.
- Verá usted. Llegué a Sevilla algo desmoralizado por lo que todos sabíamos me venía sucediendo en Barcelona. Luego, una vez aquí, me encontré desambientado; el cambio de ciudad influyó mucho por otra parte, sin vivienda, ya que yo soy hombre de hogar, los míos, la familia, teniendo que estar en un hotel, resumiendo, que no me hallaba…Y claro, todo eso repercutía en el rendimiento deportivo. Tan pronto tuve piso, los míos se acomodaron y empecé a reaccionar en un medio distinto al que padecí en Barcelona últimamente y me fui reponiendo. Me encuentro a gusto, satisfecho y dispuesto a demostrar la confianza que depositaron aquellos que me trajeron
- ¿Cuánto te resta de permanecer en el Betis?
- Aparte de la temporada transcurrida, tres más
- ¿Volverías a Barcelona?
- Depende del club que me solicitara, condiciones económicas y situación… ¡Ahora me encuentro muy bien en Sevilla¡
- ¿Cuántos encuentros has jugado en el Betis?
- Aproximadamente quince. No puedo asegurarlo
- Como antiguo rival local del Español, ¿qué esperas del equipo de Sarriá?
- Aguardo que este año supere el hándicap que padecía. El Español no sufría más que la falta de una dirección técnica positiva y severa. Con Barrios la tiene. Barrios es un entrenador de mano dura y criterio propio y eficaz. ¡Ya verán en Barcelona como este año el Español marcha¡
De Tarrasa llegó Oliet, el defensa derecho bético. Y llegó en un mal momento para él. Portu, el veterano zaguero, manteníase triunfalmente en el puesto para el que venía el catalán. Y no era ocasión de sustituirlo, Después Oliet resultó lesionado la tarde de su debut en el equipo sevillano con motivo del encuentro en El Ferrol para el Trofeo Concepción Arenal. Y aquella lesión, aunque no grave, dejó fuera de combate por cierto tiempo al catalán. Así la cosa, marchó el Betis a visitar al Real Madrid en Chamartín. Se jugaba la segunda ronda de la Liga y Barrios tuvo que recurrir en el último minuto a Oliet, porque Portu no estaba en condiciones. La actuación de Oliet en Chamartín fue francamente sensacional.
- La mejor que he tenido en mi vida deportiva. Puede que la iguale, pero superarla, no… Todo me salió redondo
- ¿Y desde entonces el público sevillano cree en ti?
- Era natural que antes no confiara. Yo era, por estas latitudes, un desconocido
- ¿Puedes responder a más?
- ¡Pues claro¡ Ahora es cuando empiezo a centrarme. Tengo 26 años y a la presente, militando en Primera División, es cuando empiezo a alcanzar la granazón, la justeza profesional apetecida…
- ¿Te gustaría volver a Cataluña?
- Si es como jugador me gustaría volver más adelante. Cuando tenga un nombre nacional, lo que no dudo voy a conseguir aquí en el Betis…
Como el lector apreciará, Oliet es un hombre que confía ilimitadamente en sus virtudes.
Bien conocido es por aquí que el reciente traspaso de Grau, el defensa del Sabadell, al Betis causó profundo disgusto por Cataluña y esencialmente en los medios españolistas. Las causas de sobra son conocidas, pero pretendíamos saberlas del jugador. La respuesta fue tajante:
- Tanto el Español como el Betis estaban en igualdad de condiciones. El Español, cuando me tuvo, me cedió y después me traspasó sin cobrar nada al Sabadell, pero…se desentendió. Únicamente me reclamó cuando tuvo noticias de mi traspaso al Betis, pese a que ya antes me consideraban en el equipo de la Cruz Alta
- ¡El derecho era del Betis¡
- ¡Y vine al Betis¡
- ¿Te hubiese gustado ir de nuevo al Español?
- Ahora el Betis goza de mayor popularidad y es el equipo más adecuado para alcanzar la fama. No obstante, aguardo, tal como dice Bosch, que este año, en manos expertas, se rehabilite. De verdad que lo deseo de todo corazón
- ¿Jugaste muchos partidos con el Español?
- Uno, frente al Valencia. Seguidamente me cedieron al Sabadell, donde terminé de hacerme…
- ¿Qué le sucedió al Sabadell la anterior campaña para no ascender a Primera División?
- Fallamos en los momentos cruciales. Los puntos que nos arrebataron en la Cruz Alta el Alavés y el Basconia influyeron decisivamente. De haber contado el Sabadell con gentes, estoy seguro que hubiéramos ascendido directamente a la Primera División
- ¿Puede encajar el Sabadell en la máxima categoría?
- Para desenvolverse cómodamente en ella necesitaría ampliar el estadio; de lo contrario, iba a sufrir estrecheces. El aforo del recinto no sobrepasa los quince mil espectadores
- ¿Influyeron en lo sucedido con el Sabadell los traspasos de Xanin y Sitges? Se lo preguntamos a Grau y el defensa central, dirigiéndose a Sitges le instó:
- A la pregunta debes de responder tú, que eres el interesado…
- Precisamente por ello no debo responder; porque soy uno de los interesados. Lo único que puedo asegurar es que con el traspaso de Grau, Xanin y el mío, el Sabadell ha salvado la situación económica. Con superávit, con un superávit de millones. ¡Algún beneficio se ha conseguido¡
Sitges nos aclara que ha permanecido seis temporadas en el Sabadell y una en el Atlético Baleares, en cuyos clubs se ha deslizado hasta la fecha su vida deportiva.
Comentamos la coincidencia de apellido con la bella ciudad veraniega de la costa catalana, y el jugador esbozando una amplia sonrisa manifiesta:
- ¡Pues todavía la coincidencia tiene más gracia¡ Mis dos apellidos primero son como los dos de las ciudades eminentemente veraniegas de Cataluña: el paterno Sitges, el materno Molins; playa y montaña en un solo hombre…
Sitges es hombre que puede servir de mucho para la propaganda turística estival. ¡Ahí es nada cuando en los periódicos nacionales y extranjeros aparezcan en grandes titulares aquello de Sitges Molins está de moda¡