Obsequio del Ayuntamiento de Cádiz al Betis. 1964

El buen ambiente histórico que el Betis tuvo en la ciudad de Cádiz durante la primera mitad del siglo XX, que ya vimos por ejemplo aquí con motivo del Campeonato de Liga ganado por el Betis en 1935, comenzó a perderse a raíz de algunos incidentes en partidos en la década de los 50.
Incluso el Ayuntamiento gaditano metió baza en este asunto con una carta en la prensa en la que establecía la prohibición por parte del Ayuntamiento a que el Betis jugase en el estadio Carranza, propiedad del consistorio gaditano, salvo en caso de partido oficial, lo que determinó que el Betis no participase en el Trofeo Carranza, organizado por el Ayuntamiento, durante las primeras ediciones del torneo. Hay que señalar que estos problemas fueron directamente entre el Betis y el Ayuntamiento gaditano, no con el club cadista.
Benito Villamarín, habitual veraneante en Cádiz, supo encauzar estos problemas, limando asperezas y propiciando un acercamiento entre ambas instituciones. De forma que en esos primeros años de la década de los 60 fueron frecuentes las cesiones de jugadores verdiblancos al equipo amarillo.
En 1964, merced a la brillante clasificación del Betis en la tercera posición de la Liga, por fin fue posible que el club verdiblanco participase en el Trofeo Carranza, el torneo de la pretemporada más importante del fútbol español.
Con motivo de la presencia por primera vez del Betis el Ayuntamiento gaditano hizo entrega al club verdiblanco de un azulejo conmemorativo con la siguiente leyenda: “El alcalde grande de Cádiz D. José León de Carranza al Real Betis Balompié. Trofeo Ramón de Carranza. Agosto 1964. Año del Puente”, y en el que se representaba un puente que unía las ciudades de Cádiz y Sevilla, y sobre el que aparecían los escudos de las dos localidades y el Real Betis Balompié. Hay que recordar que en ese año 1964, concretamente en mayo, el Ministerio de Obras Públicas había concedido por fin la realización del puente que iba a unir a la ciudad de Cádiz con el otro extremo de la Bahía a través de Puerto Real, y sin tener que atravesar San Fernando. El puente comenzó a construirse en 1966 y se inauguró en 1969.
Por cierto el alcalde que entregó este azulejo al Betis, José León de Carranza, fue el mismo que en 1958 vetó la participación del Betis en el Trofeo Carranza.