Roberto Martín

Roberto Martín Sáez, nacido en Portugalete (Vizcaya) en 1910 y fallecido en Portugalete el 4 de enero de 1934.

Centrocampista.

Tras jugar en el Portugalete, equipo de su localidad natal, pasó a formar parte del Baracaldo, en el que militó durante 3 temporadas.

En el verano de 1932 fue fichado por el Betis en el marco de la operación del fichaje del guardameta Urquiaga por el conjunto verdiblanco, en la que el portero era el gran objetivo pero que se complementó con la adquisición de esta joven promesa.

Debutó en un amistoso contra el Málaga Sport Club en el campo de El Carmen el 19 de agosto de 1932, formando parte de la medular bética junto a Peral y Adolfito.  Su debut en partido oficial se produjo el 24 de septiembre de 1932 en la primera jornada del Campeonato Mancomunado en el campo  de la Sociedad Taurina en un empate a 1 contra el Valladolid. Aquí la línea media ya la formaban Peral, Soladrero y Roberto, que se convirtió en la alineación clásica de la línea media de esa temporada, en la que el Betis debutó en la Primera División, y en la que Roberto fue uno de los futbolistas destacados del equipo.

Pero en la temporada siguiente se torció su carrera de forma abrupta. El 1 de octubre de 1933, jugando en el Patronato contra el Athletic de Madrid un encuentro del Campeonato Mancomunado, sufrió un fuerte golpe en la región lumbar a pesar del cual siguió disputando el partido.   Tras una convalecencia en Sevilla en el mes de noviembre se determinó que volviese a su localidad natal para restablecerse, pues se veía que la recuperación iba a ir para largo.

A comienzos de enero de 1934 se produjo su fallecimiento en el domicilio familiar en Portugalete, cuando sólo tenía 23 años. Dado que el Betis se encontraba en Bilbao camino de Santander, donde debía jugar el 7 de enero, toda la expedición verdiblanca acudió a su entierro.

Historial

En sus dos temporadas en el Betis Roberto jugó 14 partidos de Liga, 6 de Copa, donde marco 1 tanto, 8 del Campeonato Mancomunado, 1 de la Copa Andalucía y 9 amistosos.