Viajar y contar. Bilbao 1980.
En diciembre de 1980 el Betis acudió a Bilbao para disputar en San Mamés la jornada 14 del Campeonato de Liga de Primera División. El Betis era séptimo en la tabla, mientras que los rojiblancos estaban el 15 en la clasificación. Para el Betis era un mal momento, pues sólo 4 días antes de este partido, jugado el 7 de diciembre, el equipo había caído eliminado en la segunda ronda copera por el eterno rival.
En las páginas de la Hoja del Lunes el periodista Fernando Gelán narraba al día siguiente del partido, que se saldó con una victoria local por 2-0 con goles de Dani y Goicoechea, diversas circunstancias de la actualidad bética al hilo de este viaje.
Como curiosidades de la época lo frecuente que era en los desplazamientos de los equipos acudir al cine, los viajes que se hacían casi siempre acudiendo previamente a Madrid, dado que no había conexiones aéreas directas suficientes entre Sevilla y otras ciudades, los menús de las concentraciones, el eterno rumor del traspaso de Rafael Gordillo (en este caso al FC Barcelona) o los intentos de los azulgranas por hacerse también con Luis Carriega…
- Muy de mañana emprendieron los verdes su periplo a tierras vascas. Tras una breve espera en Madrid se continuó a Bilbao, adonde se llegó a buena hora para comer. Mientras en Sevilla continuaba el frío y en Madrid no era moco de pavo la rasca que hacía, en Bilbao la temperatura era mucho más suave. Por el contrario, llovió con bastante intensidad la tarde y noche del sábado.
- Por la tarde la cosa no invitaba más que a irse al cine. Y eso hicieron los béticos, que se fueron a ver “Fuera de la ley”, que no satisfizo a los jugadores y resultó un poco rollo. Pronto se fueron a la cama tras la correspondiente cena. Y por la mañana del domingo no dio tiempo para mucho más que para estirar las piernas y correr en el restaurante del hotel.
- Por cierto, el restaurante de fama internacional se llama Bermeo, pero la verdad es que los béticos no pudieron degustar las maravillas gastronómicas de la cocina vasca. Me comentaba Vicente Montiel que siempre hay que limitarse al mismo menú, sea en Murcia o en Bilbao. En este caso el menú antes del partido fue el siguiente: consomé, merluza a la vasca o solomillo a la plancha. Especialidades simples, pero no por ello menos sabrosas.
- En el viaje de ida acompañó, pero sólo hasta Madrid, a los suyos el presidente Mauduit, que se volvió en la tarde del sábado a Sevilla. Iba a traerse la pasta del estadio, según él esos trescientos kilos que quedan para pagar las obras de remozamiento del estadio. Que falta que harán, sobre todo después de la eliminación copera que deja un poco al aire la economía bética. Aunque no tanto, las cosas como son.
- Para el ciclo copero el Betis tenía presupuestados veinte millones de ingresos que se han quedado cortos en medio millón. El déficit es pequeño, pero el seguir en la competición podía haber supuesto unos ingresos extras que hubieran permitido pensar en realizar algún fichaje interesante. De momento hay stop al tema. Hasta que no esté cerca del final de temporada no se sabrá cómo va a estar la cosa. Stop, por tanto, a los fichajes importantes y de momento a espiar en las categorías inferiores.
- Otro tema en el que tiene incidencia esta cuestión es que se reconsiderará el traspaso de Gordillo a final de temporada. Si el resultado económico y deportivo no acompaña se volverá a plantear el tema porque el Barcelona insiste en ello. La oferta será sustanciosa y la correlación de fuerzas en la directiva puede ser distinta, aparte de que el presidente bético estás liberado del compromiso con las peñas que sólo consiguieron un cuarto de la recaudación ante el Cosmos.
- Y hablando de Barcelona otro dicen que estará por allí el año próximo es Carriega. El Barcelona insiste en que es su entrenador pase lo que pase este año con don Helenio. Y el gallego me comentaba “eso son habladurías, son ganas de hablar…. Lo cierto es que al año pasado en mayo vinieron por mí tres veces. Y yo que me quería ir a casa a descansar me quedé en el Betis. Era el Betis o mi casa y este año tengo el mismo planteamiento de irme con los míos”. Pero lo cierto es que queda mucho tiempo para ello.
- Y de malestar en la plantilla, nada. Eso me decía Enrique Morán, al que muchos achacaban ciertas broncas con sus compañeros. “No ha habido nada de nada, son infundios, mentiras. Me llevo fenomenal con todos y no ha pasado nada en ningún sitio. El ambiente en el equipo es muy bueno. No sé quién quiere hacer ver otra cosa…”. Así lo parece ahora. En fin, que esta semana queda ese nuevo derbi lleno de interés. Y después de él, habrá entrega de premios MBO a los mejores de esta parte liguera.