De «verdirosa»
Y con el rosa llegó la victoria al Benito Villamarín. Entre críticas y polémicas, el “Día de la Mujer Bética” fue una auténtica fiesta en la Avenida de la Palmera. Sirvió para dar color a un estadio que, con más de 40.000 personas, volvió a disfrutar del balompié.
Pese a que el encuentro se complicó, la garra de Juan Merino salió a relucir sobre el tapete heliopolitano en un día soleado, donde la felicidad se reflejó en cada rostro presente en el feudo verdiblanco.
Victoria clave y 34 puntos en el casillero a falta de diez jornadas para el punto y final de la competición doméstica. Dos victorias y dos empates en su verdadero Tourmalet. 8 puntos que bien pudieron ser 12 pero que, visto lo visto, deja al cuadro verdiblanco en una situación cómoda antes de visitar a los “leones”.
La alegría quedó patente tras el tanto de Rubén Castro y el pitido final del colegiado, este protagonista hasta que Alfred N´Diaye saltó más que ninguno para cabecear un centro de Joaquín medido con escuadra y cartabón. Éxtasis en gol norte. El conjunto verdiblanco se abrazaba y, junto a ellos, un Palmerín eufórico, conocedor también de la importancia de los tres puntos hoy.
Algunos de los protagonistas de la mañana atendían a los medios oficiales del club verdiblanco. Uno de ellos, el central Bruno, decía lo siguiente:
“Ha sido brutal. El ambiente, el equipo currando… Hoy no estábamos tan fluidos con el balón y era un partido muy trabado, con mucha tensión. El equipo supo adaptarse y cambiar el chip ante un rival muy peligroso en las transiciones. Al final fuimos nosotros los que matamos el partido a la contra. Estoy muy contento por ver a la gente disfrutando con su equipo y por ver a los compañeros que tengo delante partiéndose el alma, eso tiene mucho valor. Sumamos 34 puntos y el rival no suma, así que todo es muy importante hoy”.
“Ya si Alfred marca goles de cabeza, esto es de locos –risas-. Muy contento por él porque es un currante, muy buen tío. Le felicito, me alegro un montón por él. Cuando entró el balón estaba más contento yo que él, sobre todo por lo que significó”.
Entre risas y caras de felicidad, aparecía otro de los jugadores destacados del encuentro ante el conjunto nazarí. Dani Ceballos analizaba el 2-0 en el Benito Villamarín:
“El partido se nos complicó un poco pero hemos sabido sacar adelante el resultado. Con uno menos el equipo estaba atrás y no podía crear ocasiones. El gol de N’Diaye ha sido clave y nos ha dado una gran alegría a todos”.
“Sí, llevamos seis partidos consecutivos sin perder y el equipo se encuentra en un momento de forma bastante bueno. Veníamos de ganar 0-3 en casa del Espanyol y ahora, ante un rival directo como el Ganada CF, ganamos 2-0 con un jugador menos casi toda la segunda parte. Creo que hay que conseguir el objetivo lo antes posible para estar más tranquilos al final de la temporada”.
“Veíamos que era un partido que se nos había complicado bastante y creo que lo que nos ha inculcado Merino, que es actitud, se ha visto reflejado en el campo. Los diez jugadores que estaban sobre el terreno de juego se han dejado la piel y ha dado sus frutos. Hemos conseguido la victoria con ese poquito de suerte que nos ha faltado en otros partidos”.
Por fin, se respira tranquilidad en la entidad verdiblanca. El equipo juega, muestra intensidad y actitud. Tiene pegada pero, lo mejor, se deja la piel en cada jugada. Tres puntos de oro hoy. La salvación, más cerca.