Reportaje Manquepierda: De Valdemoro al Molinón
Desde que salió el calendario de esta temporada Gijón era uno de los objetivos fijos para la Peña Bética de Valdemoro. Y así, en esta penúltima jornada de Liga nos encaminamos hacia las tierras astures con una doble alegría: por un lado el hecho de habernos salvado ya matemáticamente, y por el otro la inmensa satisfacción que apenas 3 días antes nuestro equipo nos había regalado.
El sábado a las 7 y media de la mañana, en teoría, nos poníamos en camino un grupo reducido, pero selecto y escogido, compuesto por el gran Cáliz, nuestro presidente, Juanmi, nuestro fotógrafo oficial, Richi, Ana, David, Paco y el que esto escribe.
Y cuando digo que salimos en teoría a las 7 y media es eso, mera teoría, porque realmente hasta las 8 y 20 de la mañana no somos capaces de ponernos en la A-6 camino de Asturias. ¿Motivos? Alguno que aún no conoce el significado de la expresión al lado de y junto a, además de un tremendo lío de carreteras, autovías, radiales, M-40, M-50, M-509, etc
El pueblo castellano de Vega de Valdetronco es el primer afortunado en recibir nuestra visita en torno a las 10 de la mañana para echar un cafelito y estirar un poco las piernas. A medida que nos vamos acercando a tierras asturianas las nubes van apareciendo y cuando entramos en Asturias el tiempo es ya claramente lluvioso, aunque la temperatura es agradable. El cántico de “Asturias, patria querida”, sirve para celebrar la entrada en tierras astures.
Nos encaminamos hacia las cercanías de Oviedo, donde hemos quedado con uno de los grandes representantes del Beticismo en Asturias: el amigo Isi, que será nuestro guía turístico y gastronómico.
Ya en su compañía y de Ana y Olga, una gran bética de la peña 15-J también desplazada para ver al Betis, nos vamos para Gijón, buscando el hotel NH en el que se hospeda el Betis, y que está situado muy cerca de El Molinón. La entrada a Gijón ya nos sorprende con una pancarta de apoyo al Sporting
Allí vamos con el objetivo de entregar a Rubén Castro la placa con la que la Peña Bética de Valdemoro premia su campaña de la temporada anterior. Un premio que se elige por votación de todos los socios, y en el que el delantero canario fue elegido por su gran definición ante el gol.
En el hotel van también apareciendo más béticos de todas partes: el vallisoletano José y su esposa, dos clásicos siguiendo al Betis, Rafa (Palmerín) con Juan (de Lebrija) y su sobrino Juanma, que han venido desde Santander, adonde llegaron por vía aérea esa misma mañana, y Enrique, un bético de Avilés con su esposa y su hijo Fernando, con el corazón dividido entre el Betis y el Sporting.
Mucha buena gente unida en torno a unos gloriosos colores y que, después de darle la placa a Rubén, se encaminan hacia la parte vieja de Gijón en busca de sidra y buenas viandas, que son más de las dos de la tarde y el estómago dice “aquí estoy yo”.
Ya situados recibimos lecciones de los amigos asturianos sobre cómo se escancia la sidra y cómo hay que bebérsela inmediatamente. Todos practicamos con resultados dispares. La comida transcurre entre canciones e himnos varios, fruto de nuestro fervor verdiblanco y del estado de euforia que produce la sidrina. También nos cantan el himno del Sporting Fernando y otros clientes de la sidrería en la que estamos.
Después de un paseo por Gijón, pasamos por el hotel para dejar los bártulos, y de nuevo volvemos al NH para ver salir a los jugadores camino del Molinón.
Hacia El Molinón nos encaminamos para ir situándonos, pero antes nos damos otra vuelta por la zona del bebercio en los alrededores del campo sportinguista, donde se concentra la afición local, y con la que confraternizamos sin el menor problema. Mucho se estima por allí al Betis por parte de la magnífica afición rojiblanca, que demuestra su fidelidad a sus colores de forma permanente, y de la que esperamos que, si no consigue salvarse en la última jornada, el año que viene esté de nuevo en la Primera División, el sitio que le corresponde.
Ya dentro del estadio nos situamos en la zona reservada para los béticos en Tribuna Norte. Colocamos nuestra pancarta junto a otras, como la de Betisweb, la Peña Bética de Casariche ó la Curva Resistencia del Gol Sur. Béticos de Cazalla, de Camas ó de la Peña de Mujeres Béticas, etc, todos unidos detrás de las trece barras.
Calentamos la garganta cantando y animado también a la afición local ( … es de Primera, Sporting es de Primera…), que canta por su parte el Musho Betis, por lo que una vez más nos volvemos a unir con la magnífica afición sportinguista.
El partido es simplemente entretenido y se juega, por nuestra parte, sin preocupaciones y a un ritmo sosegado. A destacar las buenas maneras que demostró Nono, y la gran motivación y buena forma de Pozuelo. Ojala tengamos aquí a dos buenos peloteros.
Al acabar el partido volvemos a reponer fuerzas en una sidrería cercana al estadio, y ya en horario de domingo nos recogemos, aunque algunos aún prolongarán su incursión en la noche gijonesa.
El domingo por la mañana, ya con un espléndido día soleado, toca un poco de turismo en la ciudad rival: Oviedo, donde vamos a ver el campo del Carlos Tartiere, magnífico y una pena que esta ciudad y su club estén en Segunda B , y las ermitas prerrománicas que están en el monte Naranco: San Miguel de Lillo y Santa María del Naranco.
Y luego una banda de gaiteros nos despide en el centro de Uvieu, aunque algunos intentan convertirlos a la verdadera y única fe: la verdiblanca. Creo que no lo consiguieron, allá cada cuál con persistir en sus errores.
Y ya, después de la visita cultural, nos ponemos en el camino de regreso hacia casa. Será en Palazuelo donde paramos a comernos un bocata y seguir camino de Madrid, después de interesantes charlas futbolísticas y de todo tipo. A las 7 ya estoy en casa, cansado pero contento con un viaje tranquilo, y en el que fuimos a Gijón a pasarlo bien, con nuestro equipo ya con los deberes hechos, aunque con la tristeza de ver al conjunto local en una mala situación.
Esperemos que sea por un periodo breve.
Enlaces de otras crónicas de Valdemoro on Tour
http://www.manquepierda.com/blog/mas-alla-de-las-fronteras/
http://www.manquepierda.com/blog/de-valdemoro-a-tarragona-con-parada-final-en-aluenda/

Espectacular la crónica que has escrito Alfonso, eres un máquina con una pluma en la mano, todo muy bien detallado y resumido (Pedro y Heidi no encontramos al final a las cabritas, jejeje). Enhorabuena por la redacción y muchas gracias por dejar constancia de este viaje tan bonito.
Un abrazo Alfonso
José María Cáliz
No esparabamos menos de una gran persona como tu alfonso, muchas gracias por la compañia en este viaje nunca lo olvidaremos.
Enorme el reportaje. Soy bético y medio asturiano y al ver estas imágenes casi se me saltan las lágrimas. Quien pudiera haber estado ahí.
Espectacular y currado reportaje . La foto de las gaitas no tiene despedicio…buenisiiiiiima .
Solo un pero , la foto mia escanciando no es digna de un asturiano , que modestia aparte sabe hacerlo casi como es debido . Pero bueno es lo que tiene hacerlo al sistema antitradicional que nos obligaron a tomar , con tapon y sin mojar la calle .. GRRRRR