Un tramo final de temporada propicio para crecer
Con la permanencia prácticamente en el bolsillo, el Real Betis comienza su particular carrera hacía el objetivo marcado a comienzos de temporada. Tras un curso marcado por las dudas, donde el cuadro verdiblanco no ha conseguido despegar del todo ni ofrecer una imagen regular, los de Víctor Sánchez del Amo, con 31 puntos en su casillero, tienen ante sí la oportunidad de salvar el año para que la palabra “mediocridad” desaparezca del diccionario de la parroquia heliopolitana.
Tras la victoria ante Osasuna en el Benito Villamarín (2-0), los verdiblancos se meten en el parón de Selecciones con una cifra de puntos cómoda, conscientes del nivel de los tres máximos aspirantes al descenso (Osasuna, Granada y Sporting). Con la “quema” a diez puntos, el calendario, a falta de diez jornadas para su conclusión, invita a que el cuadro heliopolitano meta una marcha más en busca de posiciones más atractivas, que den así a la entidad un salto de calidad en cuanto a sus aspiraciones, pues se marcó, al menos, el décimo puesto para esta campaña, cosa que hoy queda demasiado lejos, pues el Alavés, décimo clasificado, está a nueve puntos de los verdiblancos.
Pese a ello, la distancia no es insalvable. Disputados ya casi todos los encuentros ante los “cocos” de la categoría, las diez jornadas restantes de LaLiga Santander pueden servir para rematar el último tercio de la temporada con un buen sabor de boca.
Espanyol, Villarreal, Las Palmas, Eibar, Celta, Athletic, Alavés, Leganés, Atlético de Madrid y Sporting son los equipos a los que se tendrá que enfrentar el cuadro de Víctor Sánchez del Amo en el tramo final del campeonato. Pese a que algunos de estos conjuntos lucharan hasta el final por sus respectivos objetivos (Villarreal y Athletic por entrar en Europa; Atlético por firmar el tercer puesto; Leganés y Sporting por evitar el descenso), un cambio de mentalidad en los verdiblancos puede servir para que, lo visto ante equipos como F.C. Barcelona o Real Madrid, pueda repetirse en gran parte de las jornadas restantes.
La imagen de la entidad está en juego. Ni sensaciones, ni resultados, ni juego han acompañado este año a un equipo que ha navegado a la deriva durante toda la temporada. Diez jornadas por delante para que el bético se marche orgulloso de los suyos y para que, de paso, la entidad pueda marcar el próximo curso objetivos más ambiciosos. Lo psicológico jugará un papel clave. 30 puntos en juego dan para mucho.