El triunfo del Betis. 1932.
Como hemos ido recordando en varias publicaciones de estos días en abril de 1932 el Betis Balompié se proclamó campeón de la Liga de Segunda División y ascendió a la Primera División del fútbol español. Hace nada más y nada menos que 90 años de la gesta.
La noticia convulsionó a la afición verdiblanca en particular y a la sevillana en general, dado que pocos creían que el Betis pudiera llegar a la máxima categoría como primer representante del fútbol español. El máximo rival había estado a punto de conseguirlo en temporadas anteriores pero fracasó en su intento, y el hecho de que el Betis lo consiguiera antes produjo una importante crisis social en sus filas.
Pero nos vamos a centrar en cómo se celebró en la misma tarde del 3 de abril, después de finalizado el partido con el Deportivo de La Coruña en el campo del Patronato, que condujo a una fiesta popular por las calles sevillanas, preludio de los diversos actos de celebración que a lo largo de los días venideros tuvieron lugar por la ciudad. Acudimos para ello a la noticia publicada en el diario ABC el 5 de abril, y en el que se relatan las primeras celebraciones tras el final del partido.
A pesar de la lluvia, que comenzó a caer con fuerza en los momentos finales del partido, se organizaron en el mismo campo del Patronato grupos que, llevando al frente carteles con leyendas alusivas a la victoria, marcharon hacia la ciudad vitoreando al Betis.
Destacaba uno, muy nutrido, formado por la afición bética de Coria del Río, que fue de los más entusiastas.
En la tribuna de preferencia el público esperaba que escampase, dando muestras de satisfacción.
Muchos espectadores iban prevenidos, y las cañas de manzanilla corrían de mano en mano, brindándose por los campeones.
Por su entusiasmo se distinguía una señorita, que fue ovacionada.
Los grupos recorrieron las calles céntricas, dando vivas y entonando canciones.
En la Peña Bética del Pasaje del Duque hubo sesión solemne, invitándose a cuantos llegaron a felicitarles por el triunfo.
En los altos del mismo Pasaje, se reunieron con los directivos y jugadores tres o cuatro centenares de aficionados, que bebieron por el Betis con la natural alegría.
Fueron invitados los equipistas del Coruña y el árbitro señor Escartín, que estuvo breves momentos por tener que tomar el expreso para regresar a su procedencia.
En el Bar Jerezano hubo también fiesta. El notable tenor Sr. Feria, acompañado a la guitarra, cantó un himno al Betis, cuya letra había prevenido un hincha.
El señor Feria fue ovacionado, obligándole con los aplausos a repetir varias veces.
La noche terminó sin incidentes graves, salvo algún que otro episodio resuelto, por fortuna, satisfactoriamente.