Entrevista José Peñafuerte 1962

En diciembre de 1962 se celebró un partido homenaje a Manuel Lora Gancedo, quien fuera futbolista del Real Betis Balompié entre los años 1955 y 1957. Pasó luego al Ceuta en Segunda División, donde fue una figura destacada del conjunto ceutí, con el que llegó incluso a disputar una liguilla de ascenso a la primera categoría. En septiembre de 1961 se le detectó un cáncer que lo retiró de la actividad futbolística.
En diciembre Ceuta y Betis le organizaron este partido de beneficio para sufragar y ayudar su tratamiento. Desgraciadamente Lora falleció el 6 de enero de 1963, a los 31 años de edad. La triste noticia llegó al Villamarín en el momento en que se disputaba un Betis-Deportivo de La Coruña de la jornada 15 del Campeonato de Liga de Primera División, dándose a conocer por la megafonía del recinto bético y rezándose un padre nuestro por su alma.
Con motivo del partido homenaje jugado el 19 de diciembre en el Villamarín en las páginas del diario Sevilla se publicó esta entrevista a Pepe Peñafuerte, su ex compañero en las filas béticas durante las dos temporadas en que estuvo en el primer equipo verdiblanco.
Cuando llega el momento de rendir un homenaje se suele hacer un poco de historia del personaje. Lora, mientras el Betis y el Ceuta disputan un partido en su honor, escuchará desde la cama—y los recuerdos se le agruparán en la mente—el bullicio de los lances del encuentro.
Entre los jugadores que hoy saltarán al terreno de juego tal vez no se encuentre ninguno que recuerde al Lora jugador. Pero en las gradas sí estarán varios de sus compañeros. Todos los que puedan, seguro.
Para que nos hablase de cómo era Lora como jugador nos entrevistamos con uno de sus antiguos compañeros: José Peñafuerte.
- ¿Cuándo os conocisteis?
- Nuestra amistad es vieja. Nos tratamos por primera vez en los campeonatos locales. Lora actuaba en el Hispano Aviación y yo en el Esperanza Macarena, pero cuando llegamos a intimar más fue las temporadas en que el Betis estuvo en la Segunda División. La temporada que el Betis subió a Primera Lora fichó por el Huelva y yo por el Cádiz. Estuvimos a punto de ir los dos a Huelva
- ¿Cualidades de Lora como jugador?
- Tenía unas dotes extraordinarias para la práctica del fútbol. Pasaba muy bien la pelota y su pegada era extraordinariamente fuerte, un futbolista de gran clase. Con Jenaro formó una gran línea media y en el Ceuta, con López (actualmente en el Mallorca), constituyó la base del conjunto que llevó a los ceutíes a jugar la liguilla de ascenso a Primera División. Hasta qué punto Lora y López eran esenciales lo demuestra el hecho que al año siguiente sin estos dos jugadores bajó a Tercera División
Quizá para los aficionados no sea necesario una mayor explicación del Lora futbolista. Ellos le vieron en muchas ocasiones en el campo y dejar muestras de su pundonor.
- Recuerdo, dice Peñafuerte refiriéndose a la entrega total de Lora a los colores que defendía, que en un partido jugado en Jerez sufrió fractura de peroné, en el primer tiempo, y continuó aunque mermado de facultades hasta el término del encuentro
- Después de vuestra separación, ¿os seguisteis viendo?
- Nunca hemos perdido el contacto. Cada año al final de temporada nos solíamos ver. Bien Lora venía a mi casa o yo iba a la suya y charlábamos.
- ¿Qué me dices de sus cualidades humanas?
- Siempre ha sido agradecido, alegre y buen compañero. Tiene una gran afición por la lectura. Recuerdo que cuando nos concentrábamos en Oromana nos reunía a todos los jugadores que éramos de Sevilla: Portu, Del Sol, Jenaro, Guerrero, Cabrera y a mí. Nos solía decir: “Venid, que os voy a hablar de Filosofía”. Bromeábamos siempre. Y al final terminábamos jugando al dominó, mientras Lora se dedicaba a leer o formaba pareja con alguno de nosotros. Su compañerismo siempre ha sido perfecto y posee una inteligencia extraordinaria. Por todos los sitios que ha pasado ha ido dejando amigos
- ¿Ha ganado dinero con el fútbol?
- Lora no ha tenido mucha suerte. Sin su dolorosa y larga enfermedad tal vez hubiese conseguido crearse una situación bastante desahogada que le permitiese montar un negocio. Pero ha tenido que dejar de jugar, y con ello de ganar. Para colmo de males, su dinero lo ha tenido que gastar en la inversión improductiva de su dolencia. Parece fatalidad—continúa diciendo Peñafuerte con tristeza—que a los que la naturaleza mejor dota también les suele castigar con más encono. Mañana será un día de mucha alegría para Lora. Es importante lo que se recoja, porque necesita ayuda, pero, quizá, mucho más importante sea para él saber que le recuerdan en el mismo escenario de sus triunfos
- ¿Cómo esperas que respondan los aficionados a la llamada?
- Creo que serán muchos los que acudan al estadio Benito Villamarín. Todos los antiguos compañeros estaremos allí y si alguno no puede ir le sacaremos la entrada. Yo pediría que hoy no se miren colores y creo que no se mirarán, porque en la desgracia, si hay nobleza, no pueden existir diferencias. Yo sacaré una entrada cara.
Así haremos todos, amigo Peñafuerte.