La «Batalla de La Línea», de Don Cecilio de Triana.
El 1 de enero de 1928 el Betis jugó en el Real Stadium de La Línea contra la Balompédica Linense un encuentro de la jornada 4 del Campeonato de Andalucía, un partido que ya vimos aquí.
El Betis se impuso 2-3 en un partido que llegó a ir ganando 0-3 en el minuto 55, pero el equipo blanquinegro apretó de lo lindo y se acercó peligrosamente en el marcador, en un encuentro de gran dureza y con bastante leña, lo que se reflejó en la prensa sevillana días después. Aquí tenemos un ejemplo a cargo de la columna que en El Noticiero Sevillano, llamada Coplas de ciego; escribía Don Cecilio de Triana (José García Rufino) sobre aspectos diversos de la actualidad sevillana.
Nuestro valeroso equipo
“Real Betis Balompédico”,
que cada día que pasa
está más bravo y más bueno.
y ya tiene el Campeonato
de Andalucía, casi dentro
del bolsillo; los simpáticos
“blanquiverdes” acudieron
para jugar en La Línea
y hacer veinticinco a cero.
Tuvo lugar el partido
y vencedores volvieron
a Sevilla los del Betis
¡pero hay que ver cómo han vuelto¡
¡De milagro¡ La nariz
hinchada trae el portero;
de bollos llena, ha traído
toda la cabeza un centro,
y medio abollado un ojo
me han dicho que tiene un medio.
Como nuestro equipo son
chicos finos y correctos
disculpan al enemigo
y dicen que todo aquello
fue que el uno resbaló
porque pisó sin saberlo
una cáscara; y el otro,
–que está de chichones lleno—
asegura que en el tren
se dio un golpe en el techo.
¡Sí, sí¡ Que den a Dios gracias
si por fin vivos han vuelto,
pues yo sé que hubo en La Línea
el disloque, y un tiberio
que fue la de Dios es Cristo,
puntapiés y tente tieso…
Como nuestros niños son
jugadores de más méritos,
en cuanto vieron los otros
que el baño iba a ser completo
ganar quisieron, por guapos,
lo que no podían por buenos.
¡Y qué publiquito había¡
Al ver salir a los nuestros,
por saludos les decían
toda clase de improperios.
A Carrasco le gritaban:
¡Me lo como¡ ¡Lo desuello…¡
A Jesús le ponían verde
(pues de las iras del pueblo
no se libró ni Jesús,
que es futbolista estupendo).
La salida, protejióla
civiles, carabineros,
y aquello fue la “caraba”,
pues sin la custodia de éstos,
los bravos verdes y blancos
¡los ponen verdes y negros¡
Ya sabéis, pues, sevillanos,
cómo fue un partido homérico,
la “Batalla de La Línea”,
en la que ganaron los nuestros
a costa de los chichones
y bollos que se trajeron;
pues calcular no podían
que en vez de un match balompédico
con la lealtad y nobleza
que el Betis pone en su juego…
¡iban a hacer en La Línea
Un combate de boxeo¡