La meta fue alcanzada, de Igarfe
En junio de 1967 el Betis recuperaba la máxima categoría perdida un año antes en La Rosaleda mediante una promoción de ascenso contra el Granada en la que los verdiblancos se impusieron de forma brillante al equipo nazarí: 2-0 en el partido de ida en el Villamarín y 0-1 en el de vuelta en Los Cármenes.
Al día siguiente de este último encuentro en las páginas de la Hoja del Lunes el periodista Ignacio García Ferreira publicó este artículo, en el el que se rendía merecido homenaje al entrenador Antonio Barrios, que llegó en la jornada 18 con el equipo en quinta posición de la tabla para sustituir a Luis Belló, y consiguió clasificar al equipo en segunda posición (11 victorias, 2 empates y 2 derrotas) para así jugar la promoción de ascenso, pero también, y de forma destacada, a Pepe Valera, uno de los hombres más importantes de la historia bética y que en ese momento era el secretario técnico del club, pero que junto a José María De la Concha había tejido una importante estructura de cantera que dio en esa temporada sus frutos con la inclusión de muchos futbolistas en el equipo que recuperó la máxima categoría.
El Real Betis Balompié está nuevamente en Primera División. Una sola temporada ha durado su ausencia en los terrenos donde actúan equipos de la máxima categoría de nuestro balompié. Es lástima que el relevo haya sido hecho a costa de otro equipo andaluz, el Granada CF, que ha luchado deportivamente por mantener su categoría. Pero la diferencia conseguida por los verdiblancos en el primer encuentro de promoción ha sido insuperable para los rojiblancos del Generalife. Los béticos, en Los Cármenes, han confirmado su derecho al ascenso, al retorno a la categoría perdida circunstancialmente y por diversos motivos que ahora no viene al caso mencionar. Lo importante es que Antonio Barrios, un hombre que parece predispuesto a encontrarse siempre en el primer plano de los triunfos verdiblancos, ha devuelto al Real Betis Balompié a Primera División, y Sevilla de nuevo cuenta con dos clubs en esta categoría.
La trayectoria deportiva del once verdiblanco en los encuentros finales del Campeonato de Liga y después en los de Copa de Su Excelencia ha sido bien elocuente. Con los mismos hombres que antes no habían acabado de convencer, Barrios ha logrado el triunfo más alto. Ha tenido visión y valentía al incorporar al equipo jóvenes valores con clase y ganas de llegar, y los resultados ya hemos visto cuáles han sido: demostrar que con jugadores de la cantera andaluza se pueden alcanzar metas importantes. Este es el gran triunfo de Antonio Barrios y del Real Betis Balompié. Por esto es justo que a la hora de los parabienes no se olvide un hombre que ha hecho una labor callada anterior: Pepe Valera. De su dirección técnica han salido González, Demetrio, Macario, Antón, Telechía, Quino, y ese fruto que él maduró ha sido la clave de los triunfos que el equipo viene consiguiendo. Barrios, profesional honrado y eficaz, ha preferido esos muchachos, que tenían posibilidades, a la tarea más cómoda de pedir jugadores “hechos”. Lo que Valera preparó, él lo ha culminado magnífica, espléndidamente, ratificando que cuando un entrenador quiere trabajar alcanza resultados positivos, más espectaculares quizá que los conseguidos con figuras de relumbrón pasajero.
Barrios, este es su gran mérito, ha sabido hacer un equipo, aprovechar las características peculiares de cada jugador, y éstos han respondido con entusiasmo al servicio de sus condiciones físico-técnicas para ofrecer a los seguidores del club verdiblanco su mayor alegría: el retorno a Primera División. Enhorabuena.