Oselito en las Bodas de Oro del Betis, de Martínez de León
Ya hemos hablado en Manquepierda.com de Andrés Martínez de León y su relación con el Betis en otras entradas.
Hicimos alusión a la obra que dedicó a las Bodas de Oro del Real Betis Balompié en 1958, y en esta ocasión nos vamos a centrar en las ilustraciones que con ese mismo motivo se publicaron en el número especial que el semanario Marca dedicó al Betis el 16 de diciembre de 1958, coincidiendo prácticamente con la celebración que llevó a cabo el club bético entre los dias 20 y 30 de ese mes.
Se trata de un conjunto de 11 dibujos en las que se refleja el nacimiento y desarrollo del Betis en esos 50 años, siempre desde la óptica de humor y cariño con la que el artista coriano trató al Betis, a través de esa genial creación que fue el personaje de Oselito.
Oselito en las bodas de Oro del Betis
Ahora hace cincuenta años que «er Beti» vio la luz primera. Luz de Sevilla y sombra de la Giralda. Ná. ¡Naíta¡
Por aquel entonces el Guadalquivir era feliz; aún no se había fijado en él el ingeniero. Oselito bautizó en sus aguas al tierno infante: «Ere er Beti. ¡Viva er Beti¡»
El deseo gitano se cumplió en la criaturita. No tuvo buenos principios. Un hermano grandullón le quitaba todas las Copas, abusando de él, sin dejarle apenas jugar.
Puede decirese que «er Beti» nació bajo el signo del tomate. Porque…¡vaya si ha habido «tomate» en la vida del equipo más simpático del mundo ¡
De pronto hizose la luz y aquella cosita de «na» pasó a Segunda División y a campeón de Andalucía
Y apenas se habían afilado las lenguas para «naquerá fu» del héroe, cuando éste, de un brinco, se encaramó en Primera
Señores, ¿vamos a quitarnos el sombrero? «Er Beti» se ha subido a los cuernos, sin afeitar, de la luna, ganando la Copa de la Liga ¿Se puede decir ya viva «er Beti?
¡ El Real Betis Balompié campeón de Liga 1934-35 ¡ ¿Cómo se les ha quedado a ustedes el cuerpo? Pero… el tomate acechaba. Y durante muchos años hubo «tomate» pa er Beti, pa Oselito, pa…
«Er Beti» cogió la cuesta abajo. Primera… Segunda… Tercera… Fue entonces cuando surgió el grito más fuerte que las murallas y las desgracias: ¡ Viva er Beti manque pierda ¡
Todo pasó. Hasta «er Beti» pasó de nuevo a Primera y ahí le tenéis, tuteando a los señoritos. ¡ Y con tantos extranjeros como el que más ¡
1958. Diciembre. Sevilla. Marcha nupcial de Mendelsson. «Er Beti» desfila del brazo de su padrino Oselito. ¡ Viva el novio ¡ Queda invitada España entera (menos el árbitro de Barcelona, claro)