Señas de identidad
En estos tiempos en los que el fútbol se ha convertido en un espectáculo regido por las leyes del mercado, y en el que las Sociedades Anónimo Deportivas han pervertido en muchos casos el vínculo que unía a los aficionados con sus clubs, es más necesario que nunca reforzar esos vínculos afectivos que nos unen a unos determinados colores y a un sentimiento heredado de los que nos precedieron.
Desde aquí vamos a lanzar un mensaje en favor de nuestra manera de entender el Real Betis Balompié. Y lo hacemos reivindicando sus señas de identidad, que son además del escudo, los colores, la camiseta, el himno, el estadio, etc, toda una serie de valores en los que los aficionados béticos se identifican y nos sirven para construir esos lazos afectivos que nos unen por y para siempre.
Desde Manquepierda entendemos que la Historia, así, con mayúsculas, es otra parte importante en la construcción de esa comunidad afectiva que debe de unir al club con sus aficionados. Y que la historia del Real Betis Balompié debe de plasmarse no sólo en los papeles que hablan de ella, sino también en gestos y hechos físicos que contribuyan de forma importante y efectiva en ese deseo de rememoración, conocimiento y divulgación.
Como hemos expresado en bastantes ocasiones, por desgracia, la preocupación por nuestra historia no ha sido una constante entre las que ha manejado el club a lo largo del tiempo. Ello se ha plasmado en una escasa conservación del patrimonio histórico documental, y en una deficiente labor de divulgación.
Afortunadamente en estos últimos tiempos podemos señalar que las cosas han comenzado a cambiar, y que hoy en día nos consta que se están realizando cosas para poner la historia de nuestro club en el sitio que merece.
Con frecuencia se homenajea a ex jugadores y directivos de épocas pasadas, en persona o en la de sus familiares, se recuerdan en las redes sociales fechas y se conmemoran aniversarios de acontecimientos de nuestra historia, se comienzan a crear en las instalaciones del estadio espacios relacionados con esa reivindicación de la memoria del club y de la afición, o se producen en los medios de comunicación propios programas televisivos destinados a la historia de los béticos, además de dar un importante papel a la historia dentro de la revista digital que el club realiza.
Todas estas actividades son motivo de satisfacción, y agradecemos y reconocemos el esfuerzo que actualmente se está realizando. Lógicamente siempre querremos más, y debemos de ser exigentes también es esta materia, porque son muchos los años de retraso que tenemos acumulados.
Como decíamos más arriba la historia del Real Betis Balompié debe de estar presente en el espacio físico en que éste se desenvuelve de forma permanente, y que no es otro que el estadio y la ciudad deportiva. Y más ahora, cuando está próxima la finalización de las obras de construcción del Gol Sur y de reforma de todo el estadio, tanto exterior como interior.
Por eso a lo largo de seis entregas lanzaremos seis propuestas concretas encaminadas a plasmar aspectos relacionados con nuestra historia, y que creemos pueden contribuir a profundizar los lazos afectivos entre la afición y el club a través de ésta. Unas las consideramos importantes, porque están relacionadas con la propia nomenclatura del club, mientras que otras responden a determinados aspectos del pasado hoy ya totalmente superados por las tecnologías modernas, pero que no dejan de tener una visión nostálgica y romántica del fútbol en el que crecimos.
Si estas propuestas contribuyen a que, de manera sosegada y constructiva, los béticos debatamos sobre estos temas y seamos conscientes del valor de determinados símbolos el esfuerzo habrá merecido la pena. Y si el Consejo del Real Betis Balompié las pone en práctica mejor que mejor.