1960-10-23 Liga: Atlético Madrid-2 Real Betis Balompié-2
«Pocas pasiones habrá en este mundo tan incondicionalmente afectivas como estas del dichoso fútbol.
El domingo al salir del Metropolitano, oímos numerosos comentarios, encendidos, apasionados, e incluso apasionantes sobre la actuación del colegiado, señor Cózar, un meticuloso árbitro, un «referee» al que la suerte–en este caso mala–le planteó una difícil papeleta con aquellos dos goles béticos, que pusieron tan caro el precio del triunfo atlético.
Repetimos que los comentarios, aun sin querer, se nos cruzaban de derecha a izquierda, y eran de los más jugosos en su mayoría y con mala nota para el director del juego todos. Suspenso en el mejor de los casos. Los nervios y la pasión no tiene duda de que ciegan a las personas y cierran herméticamente los más escondidos resortes del racionio y de la inteligencia.
El señor Cózar hizo un arbitraje en el Atlético de Madrid-Real Betis Balompié que para sí quisieran muchos.
Acaso se le puede culpar de exceso de arbitraje–la dureza del partido lo requería–, de parar demasiadas veces el juego, con el natural perjuicio para la vistosidad del espectáculo. Bueno, únicamente de un rigor desusado y de una decisión vertiginosa para señalar los penaltíes.
Si cuando éstos se producen en el área del bando forastero actúa con la misma energía y capacidad resolutiva, habrá que pensar que el Sr. Cózar tiene madera de héroe. Y bien agradecidos pueden estar los entusiastas del equipo rojiblanco de este fallo.
La mano de Areta II, aparentemente involuntaria, puesto que le dio estando el jugador de espaldas y saltando para el despeje de cabeza, pocos colegiados peninsulares la hubieran pitado.
Más bien la censura, tan reiteradamente escuchada al terminar el encuentro, debían aplicársela estos equivocados «hinchas» a su propio equipo, al que el señor Cózar, precisamente, salvó de males mayores.
El Real Betis Balompié está en juego, se nota la mano de Daucik, esa primera mano, que suele ser siempre prodigiosa, aunque luego se cambien las tornas.
Vino el Betis Balompié dispuesto a darle la batalla a los atléticos, y lo consiguió.
Cuatro defensas con Lasa de secante de Collar, tres medios, Azpeitia y los interiores Pallarés y Gargallo, y tres delanteros Lloréns, Yanko Daucik y Martín-Esperanza, completaron sobre el tablero el planteamiento por parte andaluza, sin que esto quiera decir que la fluidez no fuese también una constante en su discurrir sobre la hierba, y por más de una ocasión los dos interiores bajaban en ayuda de la defensa.
Pero, a nuestro entender, el punto neurálgico del encuentro y lo que dio oportunidad a los béticos para adelantarse con sus goles fue la labor del ala izquierda de la zaga, Lasa-Isidro, encargados de sujetar a Collar y Peiró, los dos hombres que, hoy por hoy, constituyen el verdadero y único peligro del Atlético.
El resto del equipo funcionó bien, Otero, con algunas paradas espléndidas; Eusebio Ríos y Areta II, muy firmes en sus puestos.
Los tres medios cortaron y sirvieron, y el trío de ataque se bastó para llevar la inquietud al área contraria, lo que es ya suficiente si tenemos en cuenta que Ramiro y Chuzo fueron dos colaboradores casi permanentes de la defensa. Párrafo aparte merece Yanko Daucik, el hijo del entrenador.
Un jugador de buena planta, de buena ciencia y valiente. Nunca rehuyó el duelo con el potente Griffa; por el contrario, fue él al choque y, en ocasiones, se llevó la mejor parte.
El marcó el primero y Lloréns el segundo para el Real Betis Balompié.
En el Atlético hubo un principio de juego magistral, prometedor y alentador. Pero el buen presagio duró exactamente cinco minutos. Dos después habían marcado los verdiblancos, y todo se vino abajo.
Anulados en más de un cincuenta por ciento, Collar y Peiró, quedaban Vavá–tan inoperante e ineficaz como siempre–Adelardo–embarullado–y Mendonça para resolver la papeleta. Poco, a juzgar por el resultado.
El portugués salió de extremo, y se mantuvo en esa actitud espectatitva, tan característica suya, cuando el «hule» cubre el césped y hay que saber nadar y guardar la ropa. Y el partido del domingo no se caracterizó precisamente por su diplomacia.
De los medios, ya hemos dicho que fueron más leales a su zaga que a su ataque.
El desconcierto del primer gol, y no digamos del segundo, aconsejaba asegurar las posiciones defensivas y dejarse de alegrías.
Por otro lado Griffa tenía enfrente un hombre que le daba réplica sobrada a su contundencia, y Pazos no veía un balón, multiplicando la inquietud y la zozobra cada vez que se producía una de sus intervenciones.
Mal partido, si nos atenemos a la calidad del juego únicamente.
Ni el Atlético ni el Betis Balompié hicieron avances espectaculares. La filigrana no era aconsejable. Primero, por el mal estado del terreno, muy resbalizo como consecuencia de la lluvia. Y segundo, por la «cera» en entradas y salidas que todos repartían a más y mejor.
Fue un encuentro, pues, de poder a poder. Duro, difícil. Muy difícil para todos, y en especial para el colegiado, que a pesar de tener que luchar contra los elementos, llevó la nave a buen puerto.
Repasen el partido serenamente los atléticos y comprenderán que tenemos razón para invitarles a que le envíen al señor Cózar una tarjeta de agradecimiento».
Domingo 23-Octubre-1960.-Estadio Metropolitano-Madrid.-7ª Jornada Liga Primera División 1960-1961.-Arbitró el Sr. Cózar.
Presidente Real Betis Balompié 1960-1961, don Benito Villamarín Prieto.
Entrenador Real Betis Balompié, temporada 1960-1961: Ferdinand Daucik Fonfer.
REAL BETIS BALOMPIÉ-2 Goles:
0-2, 27 Minutos: Luís LLORÉNS.
Juan Ignacio OTERO Couceiro; ISIDRO Sánchez García-Figueras, EUSEBIO RÍOS Fernández, ARETA II-Esteban Areta Vélez; León LASA Mújica, Tomás AZPEITIA Pérez; Luís LLORENS Soler, Antonio PALLARÉS Huertas, YANKO Daucik Ciboch, Mariano GARGALLO Minguillón e Ignacio MARTÍN-ESPERANZA Tejada.
Presidente Club Atlético de Madrid 1960-1961, don Javier Barroso Sánchez-Guerra 1955-1964.Entrenador Club Atlético de Madrid 1960-1961: José Villalonga Llorente:
Club Atlético de Madrid-2 Tantos:
1-2, 35 minutos, de penalti: COLLAR.
Manuel PAZOS González; Feliciano Muñoz RIVILLA, Jorge Bernardo GRIFFA Monferoni, José Antonio RODRÍGUEZ López; CHUZO-Antonio González Álvarez, RAMIRO Rodrigues Valente; Jorge Alberto De MENDONÇA Paulino, ADELARDO Rodríguez Sánchez, VAVÁ-Edvaldo Izidio Neto, Joaquín PEIRÓ Lucas y Enrique COLLAR Monterrubio.
«Crónica recogida de «Marca» Semanario de Deportes, editada por la Revista de la Afición Bética VERDE Y BLANCO:
Pies de fotos:
1ª: «El primer gol bético marcado maravillosamente por Yanko de un magnífico disparo».
2ª: «Un magnífico despeje a córner de Otero a tiro de Collar».