Afición bética en Utrera 1953

Dentro de la serie de imágenes dedicadas a la afición bética  que estamos viendo últimamente hoy nos toca una en la que se ven aficionados béticos desplazados a Utrera con motivo del Utrera 0-Betis 2 jugado el 22 de noviembre de 1953. Pasado mañana, por lo tanto, esta imagen cumplirá 60 años. Agradecer al aficionado bético Antonio Mora el poder disfrutar de esta imagen.

Este encuentro sería el último oficial que el Betis disputará en la ciudad de los mostachones, un desplazamiento habitual en el peregrinar bético por la Tercera División. Esta temporada 53-54 el Betis consigue el ascenso y abandona la Tercera División. Ya no volverá a Utrera en partido oficial hasta 1986 en partido de Copa.

El equipo verdiblanco era líder del campeonato cuando fue a Utrera y como siempre la fiel masa de aficionados béticos estuvo allí con su equipo. Así nos lo contó la crónica de ABC del 24 de noviembre:

« Es realmente admirable le fe y el entusiasmo con que la hinchada bética sigue a su equipo. La jornada del pasado domingo fue una demostración palpable de la existencia tras el Betis de un poderoso núcleo de afición. La carretera, en muchos de cuyos tramos se habían pintado expresivos vítores, tuvo desde la mañana un inusitado trajín. Caravana continua de coches, autobuses, bicicletas ¡y hasta carros¡.  Utrera, la blanca e importante ciudad, conoció un movimiento de vehículos y personas desusado hasta en Consolación. Y en realidad todo ello por un simple partido de Liga, bien que interesante por las partes actoras. Pero lo que cuenta es el espíritu arrollador de la masa bética, más sensible al club que a los accidentes de su equipo. Como que había quien aseguraba muy en serio que de estar el equipo en primera regional más hiperestesiado se formularía el apoyo a los colores blancos y verdes. Mientras unos llegaban por carretera, por otro lado el ferrocarril vomitaba más contingentes, con cartelones y atributos partidistas.

En este ambiente, animado, bullicioso y de impecable deportividad, por cuanto que no se registró el más nimio incidente, nos dirigimos al campo de Don Bosco, que ofrecía unas considerables reformas en las localidades de preferencia. El campo, que registró el mayor lleno conocido de su existencia, estaba repleto una hora antes de comenzar el partido. «

El partido finalizó con un 0-2 favorable al Betis con dos tantos de Peñafuerte.

De la imagen podemos destacar el ambiente familiar que suponía el traslado a Utrera, que se aprecia, por ejemplo, en la frecuente presencia de mujeres, lo que no es común en otros desplazamientos. También resaltar los escudos del Betis que portan algunos aficionados, como el que está en primera fila o el que lleva una mujer en la última fila de arriba.