Adolfo Cuéllar Rodríguez, presidente
«Ante la final del Campeonato de España»
«Asi mismo hemos abordado al presidente del Betis Balompié, D. Adolfo Cuéllar.
El Sr. Cuéllar, por mejor decir, es vicepresidente del Club en funciones presidenciales, porque el Betis desde la dimisión de don Camilo Romero Sánchez, está acéfalo.
Nuestro interlocutor no puede disimular su alegría por el triunfo, con tanto tesón, con tanta consecuencia coseguido.
Cuéllar, a quien ocupan mucho tiempo su cátedra y su bufete, tiene que hurtar horas al descanso para dedicarlas a la lucha que empeñó hace años para que el Club de sus amores haya llegado a este honrosísimo trance.
A la hora de recoger el fruto espiritual, justo es que el contento se le salga por la sonrisa.
–¿Un vaticinio?
–Creo que el Betis, si juega con el mismo entusiasmo que en los partidos anteriores, ganará a su peligroso rival, y además llamará la atención de la crítica madrileña que no lo conoce aún bien, por su técnica.
Hay que tener en cuenta que no es sólo la fogosidad la característica del equipo.
Este se mueve sobre el terreno con arreglo a táctica depurada.
–¿Cuál es la situación del Club?
–Como sucede en todos los momentos de éxito, la alegría de los componentes es grande, y este entusiasmo es tanto más conveniente, cuanto que contribuye a la victoria.
Espero que ese éxito, hasta ahora inigualado en Andalucía, hará variar la idiosincrasia de los aficionados, quienes se decidirán, a buen seguro, a ayudar al deporte en forma más eficaz que hasta ahora.
–¿Pero, existen dificultades de orden económico?
–Así es, dándose el caso de haberse aumentado con los éxitos, pues las personas que habían facilitado sus créditos al Club, pretenden ahora inopinadamente que todos los asuntos pendientes en este orden se resuelvan al mismo tiempo.
Sin embargo, yo tengo fe en que estos éxitos deportivos traerán como consecuencia un aumento considerable en las listas de socios, y una ayuda económica de éstos, más decidida.
Con ello, y con la buena voluntad de los señores de referencia, creo que llegaremos a un término excelente.
–¿El público de Madrid…?
–Estuvo con nosotros cariñosísimo durante el partido de desempate.
Por eso no dudé un momento en pedir que la final se celebrase en Chamartín.
Creo que de esa manera es como mejor podía corresponder el Betis Balompié a la cariñosa neutralidad de los madrileños.
En este punto terminó nuestra conversación.
Y ahora, a esperar el resultado de la prueba.
¿Qué sucederá? No es eso lo importante.
Nos bastará con ver en el partido de honor, cómo frente a todo un Athlétic de Bilbao se alinea el Betis Balompié, de Sevilla».
-Antonio Olmedo.-ABC-SE-19310620, sábado.