Entrevista Luis Del Sol 2001
Desde 1997 Luis Del Sol ocupó el puesto de responsable de la secretaría técnica del club supliendo a otra leyenda de la historia en verdiblanco como fue Eusebio Ríos.
En la temporada 2000-01, en el mes de marzo, Luis Del Sol tuvo que abandonar esa tarea de despacho y enfundarse de nuevo el chandal para asumir la responsabilidad de llevar al equipo a Primera División, tras el cese de Fernando Vázquez como entrenador de la primera plantilla.
Una vez conseguido ese objetivo en el último partido de la temporada en Jaén, Luis Del Sol expresó claramente su voluntad de volver a desempeñar la responsabilidad en la secretaría técnica, razón por la cual se trajo como entrenador a Juande Ramos.
La tarea de Luis Del Sol era difícil, pues el club tenía que aligerar una plantilla muy sobrecargada para poder hacer hueco a los refuerzos. Así, además de la finalización de contrato de Otero, que se fue al Atlético de Madrid, se gestionaron las siguientes salidas: Valerio (cedido al Elche), Torres Mestre (acuerdo para rescindir el contrato), Pavón (la misma situación), Bornes (traspasado al Recreativo), Fabao (cedido al Córdoba), Arzu (cedido al Córdoba), Pablo Niño (cedido al Cádiz), Juan Jesús (cedido al Polideportivo Ejido), Gálvez (cedido al Burgos) y Chirola Romero (cedido al Córdoba).
Y la plantilla se reforzó con las llegadas del guardameta Gaspercic ( desde el Extremadura) los laterales Tais (Racing de Santander) y Mingo (Rayo Vallecano), el central Juanito (repescado desde el Recreativo), el centrocampista Calado (Benfica) y el delantero Ikpeba (cedido del Borussia Dortmund). Estos eran los fichajes cuando se publicó esta entrevista en ABC el 18 de agosto de 2001, una semana antes del inicio de la Liga en La Rosaleda. Aún faltaban por llegar 2 jugadores más: el centrocampista islandés Gudjonsson (RKC Waalwijk) y el delantero Joao Tomas (Benfica).
En una semana se empezarán a comprobar de verdad los resultados de su labor. Luis Del Sol, tras dejar al Betis en la élite, ha supervisado la confección de la nueva plantilla, un trabajo siempre artificioso en la casa bética.
– ¿Complicación? La de siempre, tanto para fichar como para dar las bajas. Había una serie de jugadores en una situación en la que es muy difícil que se puedan marchar. A eso hay que añadir que tuvimos que empezar a confeccionar la plantilla partiendo casi de cero porque no supimos hasta muy tarde que íbamos a jugar en Primera. No he tenido un solo día de vacaciones…
– Pasar del césped al despacho no siempre se lleva bien…
– Decidir que se vayan jugadores no es un trabajo agradable para nadie, pero es mi obligación, mi competencia, y hay que apechugar
– ¿Lo ha pasado especialmente mal en el caso Cuéllar?
– Ha habido otros descartados y no ha pasado nada ni se ha formado tanto revuelo. Yo no tengo nada que ver con todo este lío que se ha formado. Hice mis informes como debía, es mi trabajo, y a partir de ahí no tengo nada que ver más con esto
– ¿Mejor entonces el banquillo?
– No. Cogí el equipo el año pasado porque me lo propusieron y acepté con mis condiciones. Cumplí con el objetivo y se acabó. No es que prefiera los despachos, porque lo me gusta es el fútbol, pero lo del banquillo no era lo que quería tras dejar al Betis en Primera
– ¿En qué medida se ajusta la plantilla a la que deseaban tener?
– Es la que pensábamos tener, se han reforzado los puestos que queríamos. Llegaron los laterales, Crosa, el mediocampista y un hombre en punta. Todo ha sido muy satisfactorio. Ahora hay que esperar que se adapten cuanto antes
– ¿Lo dice por Ikpeba?
– Sí, básicamente. Necesitará algo de tiempo todavía. Pienso que es más difícil para él, que es africano y viene de jugar en Alemania, que para un suramericano
– ¿Es la experiencia la característica básica que ha primado a la hora de contratar jugadores?
– Es lo que buscábamos, gente con oficio. Gaspercic es ya muy experto, como Tais y Mingo, que conocen bien la Liga. Calado ha jugado bastantes temporadas en todo un Benfica y ha sido muchas veces internacional, como el nigeriano
– Los que han llegado, ¿eran “los elegidos”, la primera opción que se barajaba para cada puesto?
– Bueno, la verdad es que no en todos los casos. Lo que es seguro es que eran jugadores que estaban en la primera línea, en el ramillete que manejábamos y al mismo nivel del resto. Algunas veces las negociaciones se tuercen cuando mejor están y hay que tener a otros en la reserva
– Ha mandado la mesura cuando ha habido que tirar de talonario
– Ninguno sale gratis…aunque es cierto que no hemos querido hacer locuras. Aquí hay una persona que pone el dinero y debemos sopesar muchas cosas antes de hacer un desembolso importante
– ¿Puede decirse que la plantilla está cerrada?
– Sí, está cerrada por ahora
– ¿Por ahora?
– Para mí, la puerta está ya cerrada para que venga alguno más. Pero no hay que olvidar que el presidente es el dueño y si a él le ofrecen algo positivo que pueda reforzar el equipo no es lógico oponerse. Pero tendría que ser algo muy positivo y factible en lo económico
– ¿Qué porcentaje de lo que se ha traído se ha hecho por iniciativa del club y qué porcentaje recae directamente en el entrenador?
– Hemos hablado mucho de cada jugador e intercambiado puntos de vista en todos los casos. A Mingo, por ejemplo, lo conocía muy bien Juande, bastante mejor que yo, y no hemos puesto pegas a que llegara con tan buenas recomendaciones
– ¿El resto, por tanto, son fichajes del club?
– Sí, pero siempre bajo el consentimiento del entrenador, al que le hemos consultado en todo momento. Hemos charlado mucho el técnico, el presidente y yo. Las cosas se han decidido entre los tres
– A simple vista, el verano ha sido más tranquilo que el de 2000…
– Lo del año pasado es mejor olvidarlo. Por lo que he podido ver, el ambiente es ahora mucho mejor, se ha hecho un buen grupo
– Además, los resultados han ayudado un poco…
– Ha estado bien, pero lo que hace falta es confirmar esa buena línea cuando haya puntos de por medio, a partir de la semana que viene
– ¿Se han marcado objetivos concretos en el club para la Liga?
– Simplemente situarnos bien en la clasificación desde el inicio para no pasar apuros. La idea es afianzarnos en la categoría y no pensar más que en el siguiente domingo para encontrar la tranquilidad lo antes posible; si logramos esto, llegar lo más arriba