Operación Verde 1977
El 27 de septiembre de 1977 el Comité Nacional de Competición acordaba sancionar con una multa de 150 mil pesetas al Real Betis Balompié por «incidentes de público de especial gravedad» por los hechos ocurridos en el partido Betis-Cádiz disputado en el Villamarín el 24 de septiembre.
Además se sancionaba a Julio Cardeñosa con un partido de suspensión por menospreciar al árbitro, y se amonestaba a Antonio Benítez por formular observaciones al árbitro.
Todo ello derivado de la actuación del árbitro Jacinto De Sosa que expulsó a Cardeñosa y posteriormente a Benítez antes de acabar la primera parte del encuentro. El descanso del partido se prorrogó por espacio de 57 minutos ante los intentos de un sector del público por echar al suelo las vallas que se habían instalado obligatoriamente ese verano, y que en parte fueron derribadas en Gol Norte.
Ante la situación de agravio, dado que en esa misma jornada en que Cardeñosa y Benítez fueron expulsados por nimiedades, otras jugadas mucho más violentas y polémicas quedaron sin sanción alguna, hubo una movilización por parte de la afición bética para asumir el pago de la multa y eximir al club de la responsabilidad.
Esta movilización se denominó Operación Verde y en ella se hacía un llamamiento al beticismo, encauzado fundamentalmente a través de las peñas, para recaudar fondos y cubrir el importe de la sanción económica a través de una cuenta abierta en al Banco Hispano Americano.
Fue la Peña Bética de Cazalla la que más recaudó, en gran parte porque la cabeza rectora de la operación fueron los hermanos Troncoso, vinculados a esta peña, con un total de 20 mil pesetas. Otras aportaciones destacadas fueron las de la Peña Bética de Marchena con 5 mil ptas, San Jerónimo y la Tertulia Bética con 4 mil, Bormujos 3.500, La Corza 3.100, Dos Hermanas y Heliópolis 3.000. Con 2 mil pesetas cada una colaboraron las peñas de Alcalá de Guadaira, Villegas, San José de la Rinconada, La Puebla del Río, Camas, Cerro del Águila, Coca de la Piñera, Castilleja de la Cuesta, Guillena, Osuna, Montellano, Utrera, Coria del Río y San Fernando.
Hubo también aportaciones anónimas de socios, entre ellas una destacadísima de 50 mil pesetas.
Finalmente se recaudaron 156 mil pesetas, destinando 150 mil al pago de la multa y las otras 6 mil se invirtieron en la compra de lotería de Navidad.
Se hizo entrega de la cantidad al club en el antepalco del Villamarín con motivo del Betis-Espanyol jugado el 13 de noviembre.